La tenista estadunidense Serena Williams pasó a la cuarta ronda del torneo de Grand Slam Abierto de Estados Unidos correspondiente a los octavos final, al vencer a su hermana Venus Williams en la tercera ronda.

Serena no le dio ninguna oportunidad a su hermana, pues terminó con su participación en dos contundentes sets, en los que los parciales quedaron 6-1 y 6-2, con lo que demuestra una vez más su superioridad.

En octavos de final, Serena se medirá a la estonia Kaia Kanepi, quien dejó fuera a la rumana Simona Halep, número uno del mundo; en ronda de 32 venció a la sueca Rebecca Peterson por un marcador de 6-3 y 7-6 (7/3).

La hermana Williams llega a esta instancia del torneo como número 17 en la siembra, pero eso no le quita importancia, pues es una de las favoritas para llevarse el título en su casa y con su gente, pues lo ha ganado seis veces, de los que el más reciente fue en 2014 en el Abierto de Estados Unidos.

Fuente: El siglo de Torreón

La estadounidense Venus Williams (novena del mundo) fue eliminada este domingo en la primera ronda de Roland Garros por la china Qiang Wang (91) (6-4 y 7-5) en una hora y 40 minutos.

Venus, quien cumple 38 años el próximo 17 de junio, fue víctima de sus errores no forzados (35) y del buen porcentaje de puntos que su rival en la red.

La tenista fue campeona de Roland Garros en 2002 y ha ganado además títulos en los otros tres "Grand Slams" (dos Abiertos de Australia, cinco Wimbledon y dos Abiertos de Estados Unidos). 

Fuente: EFE/La Vanguardia

Hasta los cuartos de final llegó la andadura de la española Carla Suárez Navarro en este su segunda gran actuación de este 2018, tras los cuartos obtenidos en Australia, después de caer en la antepenúltima ronda de Indian Wells ante la estadounidense Venus Williams, por un marcador de 6-3 y 6-2. La exnúmero 1 del mundo fue claramente superior en todo el choque y no dio opción a una Carla que no solo fue a remolque en el electrónico sino en los intercambios y en el aspecto psicológico.

Williams, que atraviesa un momento extraordinariamente dulce a pesar de sumar 37 años y vivir una época de mucha variedad en la parte alta del ranking, sigue recogiendo frutos de un esquema de juego que alivia toda toma de decisiones, facilitando un tenis muy agresivo, propio de las pistas rápidas. El choque, decidido en la forma y en el fondo, fue un choque de estilos que vio a la mayor de las Williams dominando desde los primeros compases de cada punto: servicio y devolución.

Entres los dos primeros golpes y la disparidad en la efectividad de los puntos de break se articuló y se desarrolló una cita sin demasiado diálogo. Si bien consta en el juego de Carla efectos y argumentos para elaborar y mover, la potencia y la decisión de Venus, con su envergadura y su aplicada capacidad para conectar ganadores, fue, como siempre ante las Williams, un problema insalvable para la española, afectada por el 1 de 7 en bolas de break a favor y por el 4 de 5 en contra.

Además, su gran talón de aquiles en este tipo de pistas y ante jugadoras ante las que Carla choca con la sensación de no poder competir del todo en igualdad, que no es otro que el segundo servicio, fue siempre una oportunidad de desequilibrio para Venus, que sumó una nueva victoria propia de su estilo de juego. Williams conectó cinco saques directos y dominó y superó en todos los parámetros estadísticos relacionados con puntos gratis o capacidad de generar errores forzados en su rival.

La norteamericana completó de esta forma las semifinales del torneo, que tendrán como protagonistas a Simona Halep y Naomi Osaka por la parte alta y a la propia Venus Williams y a la rusa Daria Kasatkina por la parte baja. Se despide así Carla Suárez, sumando otra gran semana en este 2018.

Fuente: Punto de Break

Episodio 29 resuelto en favor de la hermana mayor. Venus Williams derrotó a su hermana Serena en la tercera ronda de Indian Wells en un bonito encuentro donde la emoción se palpó en el ambiente. Se pudo apreciar que a la menor de las hermanas aún le queda trabajo por delante para volver a un nivel tal como para avanzar a rondas finales de los torneos grandes, pero llegó a complicarle mucho el partido a su hermana. 6-3 6-4 para Venus, que necesitó casi una hora y media de partido para avanzar de ronda.

Historia del tenis femenino de las dos últimas décadas. Ver de nuevo a Venus y Serena en Indian Wells era algo impensable hace unos años y gracias a que las hermanas levantaron el veto al torneo californiano recientemente, hemos podido disfrutar del 29º duelo entre estas dos campeonas. Antes del partido casi todos daban por favorita a Venus ya que llegaba en mejor estado de forma que Serena (al menos, con algo más de ritmo) y desde los primeros compases pudimos ver que la ganadora de 23 grandes se encuentra un puntito físico por detrás. Llegaba tarde a ciertos golpes y le faltaba ese feeling tan característico en ella de poner la bola donde quiere. Venus rondó el break en varias ocasiones hasta que finalmente cayó y no lo desaprovechó para apuntarse a su favor la primera manga.

Normalmente, su saque solía ser siempre una de sus armas principales pero a Serena no le estaba funcionando, acumulando poco más del 50% de primeros y la misma cifra de puntos ganados con su primer saque. Lo que más la estaba penalizando eran sus errores. Venus se mantenía muy acertada desde el fondo, poniendo siempre una bola en pista e intentando que fuese lo más profunda posible para incomodar a su hermana menor, pero Serena no terminaba de encontrar el golpe definitivo y en varias ocasiones sus bolas se perdían de larga o de ancha o morían en la red. La potencia no la ha perdido tras ser madre pero la parte que parece que más tiene que trabajar es la movilidad de fondo. En cuanto la movían a un lado o le quitaban la iniciativa, le costaba mucho recuperar cancha.

A Serena se le iba helando el gesto cada vez más con el paso de los minutos y el comienzo del segundo set no iba a mejorar para ella. Venus lograba un nuevo break y le ponía las cosas realmente complicadas. La ex-número 1 del mundo lo intentaba pero la diferencia de nivel actual entre ella y su hermana se iba plasmando no sólo en el campo sino también en el marcador. Venus logró otro break que le puso con bola de 4-0 pero dio opciones a su hermana que recuperó una de las roturas. En estos compases del encuentro se produce un baile de breaks a causa de los nervios de ambas. Puede que Serena se vaya hoy decepcionada por la derrota y al verse tan inferior a su hermana en la mayor parte del encuentro pero el haber ganado dos partidos tras más de un año parada le puede dar algo de esperanza para querer hacerlo mejor en Miami. Su potencia y su carácter ganador no lo ha perdido, tan sólo le queda recuperar su trabajo de pies y su tono físico. Cuando lo haga, volverá a pelear por entrar en rondas finales.

Venus accede de esta forma a octavos de final en Indian Wells, donde se tendrá que ver las caras con la peligrosa Anastasija Sevastova.

Fuente: Vanguardia

La estadounidense Venus Williams dijo hoy sorpresivamente adiós en la primera ronda del Abierto de tenis de Australia al caer ante la suiza Belinda Bencic por 6-3 y 7-5.

La mayor de las hermanas Williams, quinta del ranking mundial, no podrá defender de esta manera los puntos que alcanzó al llegar a la final del año pasado en Melbourne. En aquel encuentro perdió ante Serena Williams, que renunció este año al Abierto de Australia al no estar aún en plena forma tras ser madre.

Bencic, flamante campeona de la Copa Hopman con Suiza junto a Roger Federer, logró de esta manera su primer triunfo en cinco encuentros sobre Venus Williams.

La joven suiza, de 20 años, celebró emocionada su triunfo ante una de las jugadoras que seguía por televisión en su infancia. "Nunca imaginé que estaría jugando contra ellas ahora", dijo tras su victoria sobre Venus, 17 años mayor que ella, en la cancha central central del torneo.

Williams dio crédito a su rival por el resultado. "No creo que haya jugado un mal partido yo. Ella simplementente jugó increíble. Crédito suyo", comentó.

La caída de las mayor de las hermanas Williams en la Rod Laver Arena se suma a la eliminación más temprano de la estadounidense Sloane Stephens, campeona del US Open en 2017.

Stephens perdió por 2-6, 7-6 (7-2) y 6-2 ante la china Zhang Shuai en la pista Margaret Court y sumó así su octava derrota consecutiva desde que logró en septiembre del año pasado el título en Flushing Meadows.

En otro de los encuentros de la jornada inaugural del certamen, la letona Jelena Ostapenko batió a la italiana Francesca Schiavone en un duelo entre la actual y una antigua campeona de Roland Garros.

Ostapenko, ganadora el año pasado en la arcilla de París, se impuso por 6-1 y 6-4 sobre la campeona del 2011 en el Abierto de Francia en el encuentro que abrió la actividad en la Rod Laver Arena.

En ese mismo escenario está previsto por la noche el debut del español Rafael Nadal, número uno del mundo, que se medirá al dominicano Víctor Estrella Burgos.

El Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada, abrió este lunes su actividad y verá en acción a los mejores tenistas del mundo hasta el 28 de enero.

Fuente: Vanguardia

Este martes la alemana Angelique Kerber, 22ª del mundo, eliminó en la segunda ronda del Torneo de Sídney a la estadounidense Venus Williams, 5ª en la WTA, por 5-7, 6-3, 6-0, en el duelo de exnúmeros uno del mundo.

La jugadora de Bremen, de 29 años, garantizó su presencia en cuartos de final al ganar a la segunda cabeza de serie, por 5-7, 6-3 y 6-1, en una hora y 53 minutos.

Dos remontadas, en su estreno ante la checa Lucie Safarova y en segunda ronda ante la debutante Williams, colocan a Kerber en la antepenúltima fase del certamen.

Ahí se encontrará con Dominika Cibulkova, su verdugo en la final del Masters de Singapur en 2016. La eslovaca accedió a cuartos de final al derrotar, por un doble 6-4, a la rusa Elena Vesnina.

Fuente: Globovisión/ EFE/ JMMR 

No se presentarán cargos contra la tenista Venus Williams ni a la otra conductora involucrada en un accidente en el que murió un hombre en junio pasado, informó la policía de Florida el miércoles.

Un reporte de la policía de Palm Beach Gardens dijo que un tercer vehículo no identificado se atravesó en el camino de Williams, quien intentaba cruzar una transitada autopista de seis carriles cerca de su casa, lo que desencadenó una serie de eventos que concluyó con el sedán que conducía Linda Barson, de 68 años, impactándose contra el costado del pasajero de la camioneta de la tenista.

El esposo de 78 años de edad de Barson, Jerome, falleció 13 días después del choque del nueve de junio, y ella se fracturó un brazo y sufrió otras lesiones. Williams, de 38 años, resultó ilesa. La familia de Jerome Barson interpuso una demanda por muerte imprudencial en contra de Williams, en la que buscan una compensación por un monto sin especificar.

El investigador en jefe del caso, David Dowling, dijo en su reporte que el video de una cámara de seguridad cercana muestra que Williams ingresó legalmente y con la luz verde, a la intersección desde el camino de salida del fraccionamiento en el que vive. Mientras comenzaba a cruzar, un sedán de color oscuro se le atravesó, obligándola a frenar. Cuando el sedán se quitó de enfrente, Williams comenzó a avanzar a bordo de su camioneta Toyota Sequoia 2010, pero con eso se colocó en el trayecto de los Barson, quienes para entonces tenían la luz verde. El Hyundai Accent 2016 de los Barson se impactó con la camioneta de Williams a 65 kilómetros por hora (40 mph).

En su reporte, Dowling dijo que la ley estatal requiere que Williams salga de la intersección y que incluso si Linda Barson tenía la luz verde, estaba obligada a asegurarse de que el camino estuviera despejado.

El abogado de la familia Barson, Michael Steinger, dijo que las conclusiones de Dowling son erróneas y se proseguirá con la demanda.

“La señorita Williams claramente violó el derecho de circulación de nuestro cliente, que tenía la luz verde, como se indica en todos y cada uno de los reportes policiacos que se han emitido hasta la fecha”, dijo Steinger en un comunicado. “El reporte es más impreciso debido a que el video de vigilancia no indica la luz en el semáforo para la señorita Williams y por lo tanto no respalda la conclusión de la policía”

Fuente: El nuevo día

Una final entre Carolinas hubiera sido demasiado en Singapur. Venus Williams, con 37 años de edad y tras firmar dos finales de Grand Slam en este 2017, se regaló este sábado la última invitación del curso para hacer historia. Derrotando a Caroline Garcia (6-7, 6-2, 6-3) en la segunda prueba del día del WTA Finals y citándose con Wozniacki mañana a las 12:30 hora española. Eterna leyenda la de una Venus que ya ganó este torneo en 2008 que se queda a una victoria de asaltar el número 3 mundial.

Sin duda alguna, era uno de esos partidos soñados para un periodista. Por un lado, una tenista inexperta, con un sprint final de temporada espectacular e inmersa entre las mejores raquetas del circuito en la gran fiesta final. Por el otro, la más veterana del top100 demostrando que el amor y la entrega por este deporte no entiende de edades y sí de compromiso y calidad. En juego el pase a la lucha por el título de las WTA Finals en Singapur con toda una ex número 1 como Caroline Wozniacki en la final. ¿Qué más podía faltar? Todos los ingredientes sobre la mesa y la exclusiva rotulando la pantalla fuera quien fuera la ganadora.

El primer set fue tan intenso como abierto, con ambas sufriendo muchas dudas pero siempre remando en la misma dirección, como dos patos que navegan a la misma altura, intercambiando el ritmo y la velocidad pero sin separarse el uno del otro. El segundo y tercer juego se cerraron con un break para cada una, pero el resto fueron todos ganados al saque hasta desembocar en un desempate de infarto. Fue aquí cuando sí vimos los primeros nervios de la estadounidense, los primeros que le iba a costar algo más que un par de puntos. Con 7-3 a favor de la francesa, el partido empezaba con sorpresa, aunque todavía falta mucho lago por recorrer.

Acción, reacción. Traducido al tenis de los grandes campeones: si pierdo el primer set, saco lo mejor de mí en el siguiente. Por suerte para Venus, la segunda manga también representó el lado más humano de una Garcia que, pese a tener sus oportunidades, fue siempre a remolque de su oponente. Tres bolas de quiebre dispuso la gala pero todas se escaparon de sus garras. Al final, un 6-2 que no mentía y que reflejaba que la mayor de las Williams había puesto por fin sus pies en el partido, compitiendo como siempre pero doblando su acierto al saque y su determinación en momentos clave. Wozniacki se lo estaba pasando bien desde el hotel y el público ya se frotaba las manos para disfrutar del último asalto.

El golpe fue tan duro para Garcia que ni la visita de su padre a pista pudo calmarla. Más errática, perjudicada por la acumulación de sensaciones y falta de experiencia, la de Saint-Germain fue cediendo terreno en el marcador y también en la pita ante una Venus que hizo de su revés un arma mortífera. Al final no hubo ni sufrimiento para la de California, cerró el triunfo con seguridad y un grito incluido que la envía a la gran final en Singapur. Aquella que ya la vistió de maestra en 2008 y que mañana podría verla de nuevo impartir una lección ante Caroline Wozniacki.

Fuente: Punto de Break

La tenista estadounidense Venus Williams avanzó a semifinales del torneo de Finales de WTA, tras vencer por 7-5 y 6-4 a la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza.

Ambas se encontraron de nueva cuenta tras disputar la final de Wimbledon, donde la representante de España se hizo con la victoria.

En esta ocasión, su juego y en gran medida sus saques no favorecieron a Muguruza, en general registró un 58 por ciento de efectividad con el primer servicio y un 29 por ciento con el segundo, además de 32 errores no forzados.

La hermana mayor de las Williams aprovechó su saque y mostró un gran nivel de concentración y juego, además de una notable condición física que le permitió quebrar en repetidas ocasiones a la raqueta dos del ranking mundial.

La nacida en Carcas de 24 años se despidió del certamen y se queda sin la oportunidad de recuperar el liderato; la jugadora de 37 años se una a la checa Karolina Pliskova como las representantes del Grupo Blanco en las semifinales del certamen.

Williams aprovechó su saque y mostró un gran nivel de concentración y juego, además de una notable condición física que le permitió quebrar en repetidas ocasiones a la raqueta dos del ranking mundial. 

Fuente: EFE/El Siglo de Torreón

Rafael Nadal, Juan Martín Del Potro y Venus Williams confirmaron su participación para la 25ta edición del Abierto Mexicano de tenis en Acapulco, informaron este martes los organizadores.

Nadal regresó este año al primer puesto del ranking mundial de la ATP, y entre los cinco títulos que conquistó esta temporada suma el Abierto de Francia y el Abierto de Estados Unidos. En México, el español perdió la final de este año ante el estadounidense Sam Querrey.

Nadal ha ganado dos de los 74 títulos de su carrera en el balneario de Acapulco.

Del Potro fue eliminado por Novak Djokovic este año en la segunda ronda del torneo de Acapulco. El argentino fue semifinalista del US Open y se ubica en el 24to escalón de la ATP.

(Lea también: El deporte en Cataluña secunda de forma casi unánime el paro general)

En hombres también confirmaron el alemán Alexander Zverev, considerado como la próxima gran estrella del tenis y cuarto del ranking mundial, el croata Marin Cilic (5) y el austríaco Dominic Thiem (7).

Williams, de 37 años y número cinco de la clasificación de la WTA, regresa a Acapulco donde se coronó en la edición de 2010.

Fuente: Globovisión

Frente a la experiencia, la agresividad y la ilusión de una leyenda como Venus Williams. Contra todo ello pudo Sloane Stephens para pisar su primera final de Grand Slam (6-1 0-6 7-5). La estadounidense, de 24 años, prevaleció ante el empuje de una vibrante pero irregular Venus, que puso todo sobre la pista pero que encontró en una equilibrada y consistente Stephens la horma de su zapato, una defensora excelente que viene de completar un verano impresionante y que ante la oportunidad de su vida respondía con la serenidad necesaria para seguir adelante.

Con el público muy dividido, o unido por el objetivo de ver a una de sus compatriotas en la final (vera una final íntegramente estadounidense), el partido comenzó sorprendiendo: Venus arrancó muy precipitada. Muy nerviosa, jugándose cada tiro, sin poner a prueba la capacidad defensora y contragolpeadora de su oponente, que en los primeros cinco juegos no fue un muro que expelía tres o cuatro bolas ganadoras y forzaba un nuevo fallo; era Venus quién se estaba yendo por el desagüe.

La finalista de Australia y Wimbledon completó unos primeros siete juegos para olvidar. Se fue hasta los 17 errores no forzados, por cinco ganadores, con un 20% de puntos ganados con el segundo servicio. En esas circunstancias, Sloane solamente tenía que dejar pasar el tiempo hasta que Williams subiera el nivel y después responder ante la amenaza. Y es lo que ocurrió, porque Venus, que cambia direcciones con la misma facilidad que cambia el ritmo y la velocidad, comenzó a encontrar las jugadas que la caracterizan.

De manotazo en manotazo, la mayor de las Williams miró la balanza y puso mayor peso en el lado más descompensado. El ataque era igual de agresivo peor mejor temporizado y construído: ante bola corta, paso adelante, ante bola templada, invertirse para abrir la pista; de revés a revés, cambiar al paralelo antes de que el punto se forme en un intercambio largo, donde Sloane marca diferencias golpeando en carrera. El partido se va igualando pero desde la superioridad relevada en turnos. Un set para cada una y el choque, a decidirse en el parcial decisivo.

En esas instancias, el partido se ralentiza enormemente- Cada jugadora se toma más tiempo en sacar, los juegos se hacen muy largos, la tensión toma relevancia y las decisiones tienen mayor trascendencia. Sucede que los breaks van cayendo, nadie abre brecha y la oportunidad se queda suspendida en el aire hasta su desenlace. Primero, en su séptimo juego, larguísimo, excelso en demostrar las virtudes de ambas. Sloane se hace con él y saca, peor el primero no le entra. Contrabreak.

Desde el 4-4 hasta el final, el mejor tramo del partido, curiosamente donde más suele temblar la mano. El ritmo del peloteo crece con cada tiro, las piernas de ambas responden como nunca, se llega a todo y se cierran muchos puntos en la red (lugar en el que Venus encalla en términos globales; Stephens siempre está para pasarla). Es con 5-5 donde Stephens, que acumula una ascensión de más de 800 puestos y varias semanas con victorias prestigiosísimas, alcanza su primera final, desbordando una buena versión de una de las mejores tenistas de la temporada. Parece que Sloane, que estuvo justo un año lesionada, ha venido para quedarse. Jugará el sábado la final del US Open siendo número 83 del mundo.

Fuente: Punto de Break

Ha sido uno de los mejores partidos de la rama femenina en el Abierto de los Estados Unidos. Petra Kvitova llegaba enchufada tras derrotar a Garbiñe Muguruza, pero Venus Williams conoce la fuente de la juventud y ha detenido el paso de la checa este martes en los cuartos de final del Major estadonidense, que tendrá una jugadora local asegurada en la instancia final.

Venus se ha impuesto por 6-3, 3-6 y 7-6 a Petra Kvitova y se enfrentará a Sloane Stephens en la primera semifinal del cuarto major del año.

Era un enuentro para ver con atención y donde la checa mandaba en la previa ya que había sumado cuatro victorias en cinco enfrentamientos, lo que daba muestras de que sabía cómo dominar al potente tenis de la mayor de las hermanas, quien ha protagonizado dos finales de Grand Slam esta temporada.

Era un partido lleno de tiros ganadores con dos jugadoras que buscan cada punto en los partidos.

La primera en dar un paso al frente fue la europea, quiebre y distancia de 3-1 para hacer suyo el primer set, pero un momento, esta es una superficie rápida al igual que en Australia o Wimbledon y la tía Venus tenía algo más para decir.

Desapareció de la cancha Petra que no pdudo amarrar la primera manga, mientras que la local sumó cinco juegos en fila. El 6-3 en la pizarra era para Venus.

No entregaría fácil la victoria Kvitova y una vez más recetaría la misma medicina a su adversaria y con un 6-3 igualaba el macador.

Había espectáculo en la Arthur Ashe, todos disfrutaban en un partido que parecía una final. Hubo un quiebre por bando en este set, pero el tiebreak decidiría a la semifinalista. Allí, Williams fue más precisa, certera y salió a buscar la gloria.

Un contundente 7-2 daba el triunfo a Venus tras dos horas y 34 minutos de acción. 

Fuente: Tennisworldusa

Foto: WTA twitter

Venus Williams cumplió con los pronósticos y se clasificó para los cuartos de final del US Open tras deshacerse de la española Carla Suárez, en tres mangas (6-3 3-6 6-1). La estadounidense, más por recursos y experiencia que por brillantez, se instaló entre las ocho mejores, fruto de su innegable competitividad y vigencia, que la han convertida en la actualidad en una de las mejores jugadoras del mundo. Con las amplísima experiencia que la define, con la tranquilidad de competir incluso en los momentos donde las cosas dejan de salir, Venus contó una nueva victoria que le hará luchar por las semifinales del US Open.

Y es que en su encuentro de octavos hubo situaciones tan diferentes como numerosas desde el punto de vista tenístico y competitivo. De primeras, un set en el que ambas jugadoras juegan con el freno de mano puesto, algo nerviosas, erráticas y sin dominadora clara, desnivelándose posteriormente tras una primera minirremontada de la grancanaria. La veteranísima jugadora estadounidense, que mezcla errores y dobles faltas con algunas jugadas de su manual, a pocos tiros y limpiando las líneas, ve recompensa a su gama de recursos ofensivos, más chispazos que plan, y que ve, al otro lado de la red, una Carla más pasiva que agresiva.

Algo que cabía nada más arrancar la segunda manga. Se le dibuja por momentos una sonrisa a la jugadora española, síntoma de estar disfrutando de un parcial my diferente. En lugar de estar por detrás de la pelota, de lado a lado, Carla suma a su desempeño una vocación ofensiva: cambio de direcciones, uso del revés cortado, piernas más flexionadas para ganar en consistencia en todos los tiros, y una disposición por entrar hacia adelante en cada pelota. Resultado: dominio de la pista y partido nuevo.

El choque, que gana en nivel e interés llegado el parcial definitivo, se abre demasiado pronto, una circunstancia que Venus siempre maneja con claridad. No es una Venus brillante la de este US Open, pero su estilo de juego le permite generarse oportunidades de victoria a través de las variantes que le ofrece su origen, muy directo en pista, y una mentalidad relajada y renovada en estos últimos años. Cabizbaja y resignada, Carla no va a ofrecer una nueva posibilidad de remontada.

A expensas de lo que hagan Muguruza y Kvitova, la norteamericana buscará sus terceras semifinales de Grand Slam en 2017 (llegó a las finales en Melbourne y Londres), fruto de su extraordinario nivel, que si bien ha sido irregular en esta edición, siempre raya para estar cerca de la victoria en cualquier circunstancia. Venus sigue adelante y busca volver a ganar un grande.

Fuente: Punto de Break

La veterana estadounidense Venus Williams se instaló en poco más de una hora en la tercera ronda del Abierto de tenis de Estados Unidos que se juega en Nueva York al superar este miércoles a la francesa Oceane Dodin por 7-5 y 6-4.

Williams, novena sembrada y campeona del US Open en 2000 y 2001, manejó muy bien el rápido servicio de la francesa de 20 años y colocó 32 tiros ganadores con sólo 14 errores no forzados.

La estadounidense, la jugadora de más edad del torneo con 37 años, se medirá por el pase a la cuarta ronda con la griega Maria Sakkai (95ª WTA), que a primera hora había vencido a la australiana Arina Rodionova (7-5, 6-3).

fuente: Panorama

Venus Williams debutó con victoria pero no con tranquilidad. 

La veterana jugadora estadounidense arrancaba en Nueva York ante la rusa Kuzmova, en un encuentro en el que partía como amplísima favorita. 

Pero la realidad redujo las diferencias. La mayor de las Williams necesitó de un parcial decisivo para avanzar a la segunda ronda. Venus logró su billete con un marcador de 6-3 3-6 6-2. 

Su experiencia terminó por resultar definitiva.

Fuente: Punto de Break

Los datos que quedaron registrados en el celular de Venus Williams serán entregados a los abogados que representan a la familia de un hombre de Florida de 78 años que murió después de un percance vial en junio con la estrella del tenis. 

El diario Sun Sentinel informó el martes que se alcanzó un acuerdo sobre los datos antes de una audiencia judicial por una demanda presentada contra Williams. La familia de Jerome Barson solicitó los registros del teléfono para averiguar si Williams estaba distraída por hablar en celular justo antes del hecho. 

Los abogados de Williams dijeron que entregarán los datos telefónicos, que abarcan un período de dos horas y media antes y después del choque del 6 de junio. Los abogados de Williams insisten en que ella no manejaba distraída. 

Barson murió 13 días después del percance. La policía dijo que Williams conducía cuando chocó contra un sedán conducido por la esposa de Barson. Williams no ha sido citada ni acusada.

Fuente: AP/20 minutos

No fue la rueda de prensa más alegre y amena de Venus Williams, desde luego. Era la última que daba la estadounidense en su 20ª participación en Wimbledon y, desgraciadamente para sus intereses, estaba relacionada con su derrota en la final ante Garbiñe Muguruza. Seria, con pocas ganas de hablar y todavía pensando en la oportunidad perdida, la ex número 1 del mundo compartió un pequeño saco de ideas con los periodistas antes de cerrar su historia en el tercer Grand Slam de la temporada.

“Quiero felicitar a Garbiñe, ha estado increíble. Sé muy bien lo duro que ha trabajado, conozco su entorno desde que era una junior. Por supuesto que me encantaría haber convertido alguno de esos puntos clave en el primer set, pero ella ha competido muy bien, así que lo ha merecido. Ha controlado la línea de fondo y por eso ha logrado jugar mejor. Por mi parte, pienso que he tenido dos semanas maravillosas, espero seguir así el resto del verano”, confesó la de Lynwood al comenzar.

“Me hubiera gustado hacerlo mejor en la red pero es que ella ha estado fenomenal con los passing shots, por esa zona es donde aumentó la brecha y dónde ha sacado más oportunidades. Simplemente tengo que darle todo el crédito por haberme obligado a cometer tantos errores en esa faceta. He cometido una serie de errores que no me los puedo permitir en una final como ésta. Intenté encontrar mis grandes tiros pero no han aterrizado en el terreno de juego. Probablemente tendría que haber cometido menos errores”, añadió la mayor de las Williams tras perder por cuarta vez la final de Wimbledon.

“Siempre hay algo que aprender en todos los partidos, los que se ganan y los que se pierden, así que sin duda también hay algo que aprender en éste para mí. Pero tampoco me gusta perder mucho el tiempo mirando a lo que pasó, prefiero empezar ya a mirar hacia el futuro. Quiero volver a ganar un gran título, no es suficiente con llegar a la final. El secreto está en hacer las cosas un poquito mejor la próxima vez”, reconoció Venus, que mañana volverá al top10 unos meses después, lugar que al mismo tiempo abandonará su hermana, sin competir desde el mes de enero.

Con 37 años, nadie sabe hasta dónde se alargará la carrera de Venus Williams, lo que sí nos pudo adelantar es que en 2018 su nombre volverá a estar en el cuadro final del torneo. “Cada final es diferente, cada torneo es diferente. Este es sin duda un torneo muy diferente a todos los demás. Se requiere un gran esfuerzo y dar todo lo que tienes para llegar hasta aquí, a la gran final. Justo ese es mi objetivo cada vez que voy a un nuevo torneo de Grand Slam. El año que viene volveremos a intentarlo”, sentenció.

fuente: Punto de Break

La historia del tenis guarda su espacio para muchos jugadores pero hay algunos que parecen tener la llave para ocupar más páginas que el resto. Venus Williams es el claro ejemplo de una jugadora que con 37 años todavía no ha dicho su última palabra; de hecho, parece incluso que ahora su discurso es mucho más preciso que en estos últimos diez años. La estadounidense se impuso en la segunda cita de este jueves a Johanna Konta (6-4, 6-2) para avanzar hasta su novena final en Wimbledon. Lo hace además con 37 años y 29 días, un registro que solo puede superar la grandísima Martina Navratilova en 1994 cuando lo hizo con 37 años y 258 días. Leyendas del deporte que encontraron en este lugar su máximo esplendor.

Lo que estaba claro es que, ganara quien ganara, hoy en Wimbledon se iba a hacer historia. Con Garbiñe Muguruza habiendo firmado bajo llave su tercera final de Grand Slam, el segundo plato de la jornada ofrecía la mismo recompensa pero con diferentes intereses. Por un lado, la mujer que ha desenterrado las esperanzas del público local 40 años después, desde que Virginia Wade dejara el tenis femenino británico en un lugar de alto nivel. Por el otro, una mujer inquebrantable, una guerrera que en su vigésima participación en el torneo quería darse un regalo, el de su novena final, ocho años después de la última. No bastaba que en sus vitrinas ya brillaran cinco copas de campeona, Venus siempre quiere más.

Con esta presentación, todos teníamos claros quien jugaría con el factor de la experiencia y quién con el factor de la ilusión. Que sí, por supuesto que las dos tenían máxima ilusión, pero lo de Konta rozaba casi la pasión, el sueño de la elegida, la que fue llamada para poner fin a cuatro décadas de sequía local en La Catedral. Johanna quería, el único problema era que igual hoy no la iban a dejar. Con mucha igualdad y un alto grado de imprevisibilidad, el primer set se fue construyendo con mucha materia primera desde el saque, dejando al resto como el gran ausente en el encuentro. Pero llegaron los juegos importantes, el noveno y el décimo, allí donde la británica, aunque australiana de nacimiento, bajó el pistón. Lo había hecho todo bien, hasta había gozado de dos pelotas de break, pero a veces la suerte no tiene azúcar para dos tazas.

El golpe era duro, pero de peores plazas venía de torear Konta. Ya con Vekic, Garcia o Halep había aprendido a ganar sufriendo y hoy, si quería el mismo desenlace, le iba a tocar de nuevo pasar por el taller del sudor. Pero Venus ya tenía medio partido en el bolsillo y ahora su idea viajaba en direcciones muy contrarias a las de su oponente. Así pues, dándole una velocidad a la bola que hasta ahora nadie ha acercado, subió una marcha más y dibujó un 4-1 en el segundo asalto que sonaba a final. No hubo ni siquiera tiempo de reacción, pero tampoco armas. La hierba, el lugar y el momento le sonreían a la de 37 años, que jugará este sábado ante Garbiñe Muguruza su segunda final de Grand Slam de la temporada. Choque de generaciones entre dos elementos que en hierba evolucionan hacia una versión impracticable. ¿Quién de las dos alcanzará la gloria?

Fuente: Punto de Break

Nos quedamos sin palabras cada vez que vemos a Venus Williams cerrar un partido con el puño en alto. La señal de que las cosas han ido bien, de que la victoria lleva su nombre y de que su leyenda es todavía un poquito más grande. Esta vez la víctima fue Jelena Ostapenko (6-3, 7-5) en un duelo entre dos generaciones separadas por casi dos décadas que terminó llevándose la leyenda de California. Será diez semifinales en Wimbledon para ella y la oportunidad de alcanzar una nueva final de Grand Slam, la segunda de la temporada.

Cuando Venus Williams pone un pie en la pista de Wimbledon, los libros de historia empiezan a trabajar. En esta ocasión, la de Lynwood iniciaba su partido individual número 100 en la hierba del All England Club y lo hacía con un balance de 85-14. En total, veinte participaciones resueltas con ocho finales y cinco títulos. A sus 37 años pero con la energía de una veinteañera, nada le queda por demostrar a esta leyenda que todavía nos regala horas de aventuras. Pero mientras haya tiempo y el cuerpo responda, nunca es tarde para firmar otra hazaña. Hoy el reto era vencer a Jelena Ostapenko, el nuevo torbellino del circuito, reciente campeona en Roland Garros y 17 años más joven que ella.

Lo que estaba claro es que no sería un encuentro de largos intercambios ni de muchas vueltas al reloj. Entre el saque de la americana y la derecha de la letona, teníamos aseguradas altas dosis de electricidad en pista y pocas oportunidades al resto. Precisamente, ese fue justo el factor que empezó perjudicando a Alona, tal y como quiere que la llamen. Venus empezó más fuerte, más concentrada, aptitudes que si se quedan en el vestuario en los primeros juegos, corres el riesgo de empezar con una mano atada a la espalda. Ostapenko lo pagó y el 3-0 de la mayor de las Williams iba a ser definitivo para anotarse la primera manga. No le hizo falta hurgar más en la herida, cerrando con 6-3 ya marcaba el territorio que durante dos décadas ha llevado su nombre.

Claro, de la hierba a la tierra batida, la cosa cambia. La potencia de Ostapenko seguía siendo la misma, una explosividad que aquí genera más velocidad pero que en la arcilla le permite desmarcarse mejor de sus rivales. Ante Venus, otra gran cañonera, la diferencia no iba a estar en quien mejor atacase, todo lo contrario. Ambas resolvían bien sus juegos al saque, pero era Jelena la que más sufría a la hora de restar, con lo que un despiste le podía costar prácticamente media partida, tal y como sucedió en el primer parcial. Mientras tanto, Venus a lo suyo, ganando el 80% de los puntos con su primer servicio y obligándonos a cuestionar si realmente tenía 37 años la mujer que estábamos viendo bailar sobre la hierba. Ya con 36 logró meterse hasta las semifinales del tercer grande del curso, ¿por qué no repetir con un dígito más en la maleta?

De nuevo la mayor frescura mental y el mayor acierto llevaron a Venus Williams a enseñar otra lección al comienzo del segundo set. Break tempranero para incitar más dudas y navegar de manera más relajada hasta la meta. Qué fácil parece leído así, pero es que lleva haciéndolo desde 1997. Pero Ostapenko no quería colocar la alfombra roja tan rápido, por eso igualó la contienda hasta el 5-5 y dejó que la inspiración hiciera el resto. Gran reacción, pero insuficiente. Otra vez Venus sacó el libro de la experiencia y, con dos juegos consecutivos, firmaba el pase a las semifinales de Wimbledon por décima vez en su carrera. Inaudito lo que hizo, lo que hace y lo que seguirá haciendo Venus cada vez que entra y sale de una pista de tenis. Esa sensación impagable de estar presenciando a alguien irrepetible.

Fuente: Punto de Break

Venus Williams logró su clasificación para los octavos de final de Wimbledon 2017 gracias a un trabajado triunfo ante Naomi Osaka por 7-6 (3) 6-4. 

La estadounidense supo hacer frente a una rival muy osada y que presionó constantemente con un tenis incisivo, pero acabó sucumbiendo ante la experiencia y buen hacer de Venus. 

Paso franco para una mujer que ha ganado en cinco ocasiones este torneo, y que no descarta volver a luchar por él. Su siguiente rival será Ana Konjuh.

Fuente: Punto de Break