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Carlos Alcaraz se consagró campeón de Roland Garros 2025 en una de las batallas más memorables que ha presenciado el tenis moderno. Con apenas 22 años, el murciano remontó dos sets en contra y salvó tres puntos de campeonato para imponerse a Jannik Sinner por 4-6, 6-7(4), 6-4, 7-6(3), 7-6(10-2), tras 5 horas y 29 minutos de épica en la Philippe Chatrier.

Fue la final más larga en la historia del torneo parisino y una auténtica declaración de principios del español: cuando todo parecía perdido, se aferró al partido con valentía, inteligencia táctica y una resiliencia a la altura de las leyendas. Así levantó su segundo título en Roland Garros, el quinto Grand Slam de su carrera y el vigésimo trofeo ATP, cifras que lo consolidan como el gran referente de la nueva era del tenis.

El duelo entre Alcaraz (2º) y Sinner (1º) ya no es promesa: es una rivalidad dorada. Entre ambos se han repartido los últimos seis títulos de Grand Slam, y este enfrentamiento fue su consagración definitiva como herederos de una época gloriosa. París fue testigo de un espectáculo parejo, impredecible y lleno de giros. Sinner fue el primero en golpear con dos sets brillantes, gracias a su solidez desde el fondo y su temple en los momentos decisivos.

Sin embargo, lo que parecía encaminarse hacia una coronación italiana —la primera desde 1976— se convirtió en una proeza española. Alcaraz, que ya había remontado una final en 2024 contra Zverev, volvió a hacerlo, esta vez desde un déficit aún mayor. Ajustó su juego, aceleró con el revés, varió alturas, y en el cuarto set levantó tres match points para obligar al quinto parcial.

El último set fue una montaña rusa emocional: quiebres, recuperaciones y momentos de aliento colectivo. Cuando Sinner igualó a cinco tras un punto de antología —una dejada perfecta al límite de lo posible— el suspenso era insoportable. Pero en el super tiebreak emergió el Alcaraz más implacable: se adelantó 4-0 con una devolución cruzada letal y no miró atrás. Selló el triunfo con un derechazo paralelo y cayó de espaldas sobre la arcilla, emocionado y extasiado.

Corrió al palco, abrazó a su equipo, bailó con sus entrenadores y se fundió con el público parisino, que ya lo ha adoptado como a uno de los suyos.

“Estoy increíblemente feliz y orgulloso”, declaró Alcaraz al recibir la Copa de los Mosqueteros. No olvidó elogiar a su rival: “Jannik, vas a ganar muchos de estos. Es un honor compartir esta rivalidad contigo”.

Sinner, que disputó su primera final de Grand Slam y dejó una actuación colosal, se rindió al nivel del partido: “He dado todo lo que tenía. No podré dormir bien esta noche, pero nos volveremos a encontrar”.

Récords y cifras de una gesta histórica

Final más larga de Roland Garros en la Era Abierta (5h 29m).

Primer defensor exitoso del título en París desde Rafael Nadal en 2020.

Primer jugador nacido en el siglo XXI en alcanzar 20 títulos ATP.

Récord positivo de 8-4 ante Sinner, con cinco victorias consecutivas, incluidas tres finales seguidas (Beijing 2024, Roma 2025 y París 2025).

Quinta final de Grand Slam ganada de cinco disputadas.

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En una final cargada de intensidad, dramatismo y simbolismo, Coco Gauff se proclamó campeona de Roland Garros 2025 tras remontar a la número uno del mundo, Aryna Sabalenka, con parciales de 6-7(5), 6-2 y 6-4, en un duelo que mantuvo a la Philippe Chatrier en vilo durante dos horas y 38 minutos.

A sus 21 años, la estadounidense conquistó su segundo título de Grand Slam —tras el US Open 2023— y, por primera vez, lo hizo sobre la exigente arcilla parisina. El himno de Estados Unidos volvió a sonar en Roland Garros una década después del último título de Serena Williams, ídolo y referente de Gauff desde la infancia. Ahora, el relevo generacional parece estar en marcha.

El partido fue un auténtico carrusel de emociones. Sabalenka comenzó con su sello característico: potencia, agresividad y una intimidación arrolladora que le permitió adelantarse 4-1 en apenas 15 minutos. Aun así, Gauff resistió la embestida, ajustó su juego y respondió con temple para igualar 4-4 en el primer set. Aun así, Sabalenka se lo llevó en el 'tie-break', demostrando su jerarquía.

Pero la historia cambió radicalmente en la segunda manga. Gauff elevó su nivel, fue más agresiva y consistente, y con dos quiebres rápidos tomó el control del set. En solo 36 minutos, empató el encuentro, con un tenis solvente y tácticamente impecable.

En un ambiente tenso, con viento racheado y un cielo cubierto, el tercer set fue una prueba mental para ambas. Sabalenka, con 70 errores no forzados, mostró fisuras emocionales que Gauff supo explotar con inteligencia. El cierre fue de infarto: tras un amago de victoria que debió esperar por una revisión, Gauff selló su triunfo en el segundo intento, se abrazó a su rival y se arrodilló en la arcilla, saboreando una consagración histórica.

“No pensé sinceramente que podría hacerlo... Me decía que sí, pero no me lo creía del todo”, confesó Gauff entre lágrimas durante la ceremonia de premiación, recordando su derrota en la final de 2022 ante Swiatek. Tres años después, vuelve a París para levantar el trofeo más preciado del tenis sobre tierra batida.

Sabalenka, por su parte, se mostró autocrítica: “Jugué un gran tenis durante dos semanas, pero hoy fue mi peor final. El viento me afectó y no pude controlarme mentalmente”, admitió con evidente frustración. Tras haber ganado en Australia en 2023 y 2024, esta es su segunda caída consecutiva en finales de Grand Slam este año.

Gauff sucede en el trono a Iga Swiatek, quien había ganado las tres ediciones anteriores del torneo, pero cayó en semifinales ante Sabalenka. La victoria de Coco simboliza más que un título: representa la consolidación de una estrella en ascenso, capaz de superar la presión, adaptarse a cualquier superficie y vencer a la mejor del mundo en el escenario más desafiante.

Su capacidad para remontar, su madurez táctica y emocional, y su constante evolución, confirman que Gauff no es solo el futuro del tenis femenino: ya es parte central de su presente.

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Jannik Sinner jugará por primera vez en su carrera la final de Roland Garros. Lo hará ante el vigente campeón, Carlos Alcaraz, en un duelo soñado entre el número uno y el número dos del ranking mundial. El italiano accedió a la gran cita tras superar con autoridad a Novak Djokovic por 6-4, 7-5 y 7-6(3), en una semifinal de altísimo nivel sobre la Philippe Chatrier.

Sinner sigue intratable: no ha cedido un solo set en todo el torneo y extiende su dominio reciente sobre Djokovic, a quien ha vencido en sus últimos cuatro enfrentamientos consecutivos —incluyendo Copa Davis, Australia, Shanghái y ahora en París—. El serbio, de 38 años, mostró momentos de gran tenis y luchó cada punto, pero las molestias físicas y un par de oportunidades desaprovechadas le impidieron forzar al menos un cuarto set.

El primer quiebre del partido llegó en el quinto juego, cuando Sinner arriesgó con la devolución para tomar ventaja 3-2, suficiente para cerrar el set sin mayores sobresaltos. En el segundo, Djokovic logró igualar 5-5 cuando Sinner servía para el set, pero no pudo mantener su saque y el italiano selló el parcial tras 73 minutos de batalla.

El tercero fue aún más parejo. No hubo quiebres y se definió en un desempate donde Sinner se mostró más firme mentalmente. El italiano logró un mini break de arranque y, tras una fallida volea de Djokovic que pudo haberle dado algo de aire, cerró el partido con autoridad.

“Ha sido muy especial jugar contra Novak en una semifinal de Grand Slam. Me obliga a dar lo mejor de mí. Es un modelo para todos nosotros”, expresó Sinner tras la victoria. “Estoy disfrutando este momento. Es raro y único en mi carrera. Ahora toca descansar y preparar la final”.

Con esta victoria, Sinner accede a su tercera final de Grand Slam consecutiva, tras conquistar el US Open 2023 y el Abierto de Australia este año. Mantiene una impresionante marca de 49 victorias y solo dos derrotas en 2024. Sin embargo, el único jugador que ha logrado vencerlo este año estará al otro lado de la red este domingo: Carlos Alcaraz.

El español, de 21 años, llega a su segunda final consecutiva en París tras la retirada de Lorenzo Musetti en semifinales, cuando el marcador era favorable a Alcaraz por 4-6, 7-6(3), 6-0 y 2-0. Musetti había comenzado a gran nivel, pero sucumbió a problemas musculares en la pierna izquierda.

Será el decimosegundo enfrentamiento entre Alcaraz y Sinner, con un historial que favorece al murciano por 7-4. Será además la cuarta final entre ambos, con ventaja de 2-1 para Carlos. Curiosamente, tanto Alcaraz como Sinner cuentan con 19 títulos en su palmarés, lo que añade un aliciente extra a esta final inédita en Roland Garros.

Alcaraz busca convertirse en el tercer jugador en este siglo que defiende con éxito el título parisino, después de Rafael Nadal y Gustavo Kuerten. Sinner, por su parte, aspira a su primer título en la arcilla francesa y a confirmar su dominio actual del circuito masculino.

El domingo, en una final cargada de historia y presente, París será testigo de un nuevo capítulo de la rivalidad que define el futuro del tenis.

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El campeón defensor de Roland Garros ya está de regreso en la final. Carlos Alcaraz avanzó este viernes a su segunda final consecutiva en París tras la retirada de Lorenzo Musetti, quien abandonó en el cuarto set por molestias musculares cuando el marcador favorecía al español: 4-6, 7-6(3), 6-0 y 2-0.

La Philippe Chatrier fue escenario de un duelo vibrante en sus dos primeros sets, con un Musetti brillante que logró incomodar y dominar al murciano en varios tramos del partido. El italiano firmó un primer set impecable, combinando agresividad, cambios de ritmo y defensas sólidas para llevárselo por 6-4. Supo evitar que Alcaraz explotara su derecha, se mantuvo firme en los momentos de presión y cerró con autoridad.

Sin embargo, Alcaraz, fiel a su carácter combativo, reaccionó. En el segundo set mostró mayor agresividad, rompió el servicio de Musetti al inicio, aunque el italiano respondió de inmediato, igualó el marcador y forzó un emocionante tie-break. Allí, el número dos del mundo mostró su temple y se impuso 7-3, igualando el encuentro.

A partir del tercer parcial, el partido cambió radicalmente. Musetti comenzó a mostrar evidentes signos de molestias físicas, y Alcaraz lo aprovechó sin piedad. El español dominó de principio a fin y firmó un contundente 6-0, antes de que el italiano decidiera abandonar el partido tras verse 0-2 en el cuarto set. El encuentro, que se extendió por dos horas y 25 minutos, tuvo un inicio de alto nivel, pero se fue diluyendo a medida que el físico de Musetti decía basta.

“Sentí al principio del tercer set que perdía fuerza en la parte trasera de la pierna izquierda. Iba a peor y decidí parar. No era lo que quería, pero fue lo correcto”, explicó Musetti tras su dolorosa retirada, que puso fin a su primera semifinal de Grand Slam.

Por su parte, Alcaraz se mostró empático: “¡Fuerza, Lorenzo! Espero que te recuperes pronto. Nadie quiere ganar de esta manera, pero estoy muy feliz de estar de nuevo en la final de Roland Garros”. También destacó el nivel de su rival y le auguró un gran futuro: “Sé de lo que es capaz. Pronto volveremos a disfrutar de su tenis”.

Con esta victoria, el murciano de 22 años se convierte en el quinto tenista más joven en alcanzar cinco finales de Grand Slam, solo superado por leyendas como Mats Wilander, Björn Borg, Rafael Nadal y Boris Becker. En el contexto español, ya supera a Manuel Santana en finales disputadas, y a nivel mundial solo Djokovic (37) y Medvedev (6) lo superan entre los activos.

El domingo, Alcaraz buscará revalidar el título que conquistó en 2024 tras vencer a Alexander Zverev. De lograrlo, sumará su segundo Roland Garros y el quinto major de su carrera. Todo parece indicar que el joven español sigue consolidándose como una de las grandes figuras del tenis mundial.

foto Lisi Niesner/Reuters

La estadounidense Coco Gauff firmó una contundente victoria sobre la francesa Loïs Boisson, con parciales de 6-1 y 6-2, para sellar su pase a la final de Roland Garros, donde enfrentará a la número uno del mundo, Aryna Sabalenka, en una final inédita del segundo Grand Slam de la temporada.

Gauff, número 2 del ranking WTA, no dejó margen para la sorpresa y frenó el sueño de Boisson, la gran revelación del torneo, quien había irrumpido desde la oscuridad del puesto 361 del mundo hasta las semifinales, eliminando a dos jugadoras del top-10, incluida su compatriota Jessica Pegula (3) y la rusa Mirra Andreeva (6). Invitada por los organizadores, la jugadora gala de 22 años se convirtió en la semifinalista de Grand Slam con el ranking más bajo en cuatro décadas y, gracias a su campaña, trepará al puesto 65, convirtiéndose en la número uno de Francia.

Pero frente a una Gauff decidida y sin fisuras, la hazaña no tuvo continuación. La estadounidense dominó desde el inicio, imponiendo un ritmo implacable, con un servicio sólido y una defensa infranqueable. Quebró el saque de su rival en los primeros compases del partido para tomar rápidamente una ventaja de 4-0, silenciando la euforia del público local. En apenas 29 minutos, ya tenía el primer set en el bolsillo.

En el segundo parcial, Boisson intentó reaccionar, generando incluso una oportunidad para colocarse 2-1 con servicio. Sin embargo, Gauff mantuvo la compostura, ajustó su juego y volvió a apretar el acelerador. Con más del 80% de puntos ganados con su primer saque, cerró el partido en menos de una hora, frustrando las ilusiones locales.

Será la segunda final en París para Gauff, quien ya disputó este título en 2022, cuando cayó ante Iga Świątek. Además, será su tercera final de Grand Slam, tras haber conquistado el US Open en 2023, precisamente ante Sabalenka.

La definición del sábado promete ser apasionante: Gauff y Sabalenka se enfrentarán por undécima ocasión, con el historial empatado a cinco triunfos por lado. Su duelo más reciente fue en Madrid, donde la bielorrusa se impuso para levantar el título. Para Sabalenka, actual número uno del mundo, será su primera final en la arcilla parisina, tras eliminar a Świątek —tricampeona defensora— en semifinales.

Ambas llegan en gran forma y con una historia reciente de rivalidad creciente. A sus 21 años, Gauff continúa haciendo historia: ya suma 26 victorias en Roland Garros y se une a un grupo selecto de estadounidenses con más de una final en este torneo, junto a leyendas como Chris Evert, Martina Navratilova y Serena Williams. Además, es la jugadora más joven en alcanzar la final en los tres torneos más importantes sobre tierra batida en la misma temporada (Roma, Madrid y París).

La final enfrentará a las dos mejores del ranking mundial, con estilos opuestos y mucho en juego. Gauff busca consolidarse como la nueva reina de la arcilla; Sabalenka, completar su palmarés con un título en París. El Philippe Chatrier se prepara para una batalla memorable.

foto Cédric Lecocq / FFT

Aryna Sabalenka ha ratificado su dominio absoluto en el tenis femenino de 2025. Este jueves, la número uno del mundo se impuso con autoridad a Iga Swiatek, triple campeona vigente, por 7-6(1), 4-6 y 6-0 en una electrizante semifinal que rozó las dos horas y media de duración. Así, la bielorrusa accede por primera vez a la final de Roland Garros y refuerza su estatus como la jugadora más dominante del circuito actual.

Con esta victoria, Sabalenka no solo puso fin a la impresionante racha de 26 triunfos consecutivos de Swiatek en París, sino que igualó su mejor registro histórico en cuanto a finales disputadas en una temporada (siete en 2024), con medio calendario aún por delante. La bielorrusa acumula 40 victorias en el cuadro principal del WTA Tour en 2025, más que cualquier otra tenista.

“Fue un duelo intenso, se sintió como una final”, declaró Sabalenka tras el encuentro. “Pero sé que el trabajo no ha terminado. El sábado será otra batalla y tengo que dar lo mejor de mí”.

Sabalenka está firmando una temporada de ensueño: campeona en Brisbane, Miami y Madrid; finalista en el Abierto de Australia (derrota ante Madison Keys), Indian Wells (caída frente a Mirra Andreeva) y Stuttgart (vencida por Jelena Ostapenko). Este sábado disputará su tercera final de Grand Slam consecutiva —US Open 2024, Australian Open 2025 y ahora Roland Garros—, algo que no se lograba desde los días de Serena Williams en 2016.

Será su sexta final de Grand Slam en solo tres temporadas. Ya ha conquistado tres títulos ‘major’: Australian Open 2023 y 2024, y US Open 2024. A sus 27 años, solo le falta acceder a la final en Wimbledon para completar el pleno de las cuatro grandes citas.

“Me siento muy cómoda sobre arcilla. Hemos trabajado mucho para adaptar mi juego y realmente disfruto competir en esta superficie”, aseguró Sabalenka, quien también valoró el nivel de su rival: “Iga está jugando un gran tenis, pero quizás hoy le faltó algo de confianza. Fue un partido de alto nivel”.

Iga Swiatek, quien había reinado sin discusión en Roland Garros entre 2022 y 2024, no logró mantener su hegemonía. La polaca, quinta del ranking, mostró destellos de su mejor tenis en el segundo set, pero se vio completamente superada en el tercero. Esta eliminación pone fin a su intento de convertirse en la primera mujer en ganar cuatro títulos consecutivos en París desde Suzanne Lenglen (1920-1924).

El revés es el más reciente de una temporada irregular para Swiatek, marcada por una suspensión de un mes a finales de 2024 debido a un positivo por una sustancia prohibida (más tarde atribuida a un medicamento contaminado), y eliminaciones tempranas en Roma y Madrid. A pesar de ello, valoró positivamente su desempeño en el torneo: “He jugado buenos partidos, y aunque no fue el resultado que quería, amo competir aquí”.

Por primera vez, Aryna Sabalenka está a un paso del trofeo en Roland Garros. Con el impulso de su mejor tenis y el respaldo de una temporada estelar, buscará su cuarto título de Grand Slam. La Philippe Chatrier se alista para un choque entre las dos grandes potencias del tenis femenino actual. La nueva reina de París será coronada este sábado, y el trono está más disputado que nunca.

foto Nicolas Gouhier / FFT

Jannik Sinner continúa su arrollador camino en Roland Garros. El número uno del mundo no dejó espacio para la sorpresa y derrotó con contundencia al kazajo Alexander Bublik por 6-1, 7-5 y 6-0 en apenas una hora y 49 minutos, asegurando su lugar entre los cuatro mejores del torneo parisino.

El duelo reflejó a la perfección el momento de forma del italiano, quien no solo dominó con su consistencia desde el fondo y su precisión quirúrgica, sino que también sorprendió con la potencia de su servicio: llegó a alcanzar los 252 kilómetros por hora, una cifra que pone de relieve su evolución física y su capacidad para imponer condiciones desde el inicio de cada punto.

Con esta victoria, Sinner firmó otro capítulo en la historia del tenis italiano: se convirtió en el primer tenista de su país en alcanzar seis semifinales de Grand Slam, una marca que confirma su estatus como el máximo referente del tenis azzurro en la era moderna.

El encuentro comenzó con un claro dominio del líder del ranking. Sinner rompió el servicio de Bublik en sus dos primeros turnos al saque y se adelantó rápidamente 5-0, cerrando el set con un autoritario 6-1. Sin embargo, el kazajo logró reaccionar en el segundo parcial, desplegando su característico estilo impredecible, lleno de dejadas y cambios de ritmo, que incomodaron al italiano durante gran parte del set.

Pero cuando parecía que el guion podía complicarse, Sinner mantuvo la calma. Un resbalón desafortunado de Bublik dio paso a una ruptura clave en el undécimo juego, permitiéndole al italiano tomar el control definitivo. A partir de ese momento, el kazajo se desdibujó, incluso recurriendo a un fallido saque por debajo del brazo en un intento desesperado por cambiar el rumbo. Nada pudo detener a Sinner, que cerró el tercer set con un contundente 6-0.

Con esta actuación, el campeón del Abierto de Australia y semifinalista del US Open en 2023 estira su racha triunfal en torneos de Grand Slam a 19 victorias consecutivas. El viernes, buscará el pase a su primera final en Roland Garros frente a Novak Djokovic, quien superó a Alexander Zverev en cuatro sets.

El choque ante Djokovic, que domina la historia grande del tenis con 24 títulos de Grand Slam, promete ser un duelo generacional y eléctrico. Será el noveno enfrentamiento entre ambos, con la serie igualada 4-4, aunque Sinner ha ganado los tres últimos duelos. París se prepara para una semifinal de alto voltaje. Y Jannik, con la madurez de un veterano y el hambre de un nuevo campeón, está listo para el desafío.

foto @rolandgarros (X)

A sus 38 años, Novak Djokovic sigue escribiendo capítulos memorables en la historia del tenis. Este miércoles, el serbio venció al número 3 del mundo, Alexander Zverev, por 4-6, 6-3, 6-2 y 6-4 para instalarse en las semifinales de Roland Garros por decimotercera ocasión. Su rival será nada menos que el número uno del mundo, el italiano Jannik Sinner, en un duelo que promete emociones intensas.

El partido fue un retrato perfecto de lo que define a Djokovic: resiliencia, inteligencia táctica y una capacidad inquebrantable de adaptación. Aunque Zverev se llevó el primer set con un quiebre temprano y un tenis agresivo, el serbio no tardó en ajustar su estrategia. Neutralizó el saque del alemán, redujo sus errores y lo desestabilizó mentalmente a base de devoluciones milimétricas y cambios de ritmo que terminaron por minar la confianza de su rival.

Djokovic encadenó siete juegos consecutivos a partir del segundo set, dejando sin respuesta a un Zverev que aspiraba a su quinta semifinal seguida en París, pero que, una vez más, quedó corto ante un rival de jerarquía. En la fría noche parisina, con las condiciones cambiando, el alemán fue desdibujándose ante un Nole que parecía rejuvenecer con cada golpe.

Esta victoria supone la número 51 de Djokovic en semifinales de Grand Slam, un récord absoluto en la Era Abierta. Además, llega a esta instancia con una racha de nueve triunfos consecutivos, incluyendo el título en Ginebra, donde comenzó a reconstruir una temporada que había sido, hasta entonces, errática y plagada de dudas.

Pero Roland Garros tiene un significado especial. No pierde un partido en el torneo desde los cuartos de final de 2022, cuando fue derrotado por Rafael Nadal. En 2023 se vio obligado a retirarse antes de esa ronda por lesión, pero terminó conquistando la gloria olímpica en París meses después. Ahora, el sueño de su Grand Slam número 25 está más vivo que nunca. De lograrlo, superaría a Margaret Court como el tenista más ganador de la historia.

El rival en semifinales será un Jannik Sinner intratable. El italiano ha ganado sus últimos 19 partidos en Grand Slam y solo ha cedido 38 juegos en todo el torneo. Viene de arrollar al kazajo Alexander Bublik (6-1, 7-5, 6-0) y ha dominado a Djokovic en sus tres últimos enfrentamientos, dos de ellos en 2023. El historial entre ambos está igualado (4-4), pero Sinner llega en su mejor momento físico y emocional, tras haber cumplido una sanción que lo mantuvo fuera por tres meses y regresar más fuerte que nunca.

En conferencia de prensa, Zverev fue claro: “Hoy me sorprendió. No le había visto jugar así en todo el año. Hacía frío y mi saque perdió eficacia. Él tenía respuesta para todo. Ha sido mejor que yo, sin discusión”.

El alemán admitió también que muchos subestimaron a Djokovic: “Tiene 38 años, pero sigue ganando a los mejores. Le ganó a Carlos en Australia, me ganó hoy a mí. Hay que respetarlo”.

Djokovic, que llegaba a París tras una gira decepcionante en tierra (eliminaciones tempranas en Montecarlo y Madrid), parece haber encontrado el punto de quiebre en Ginebra, donde se coronó campeón y se deshizo de Andy Murray como entrenador. La broma del británico durante el homenaje a Nadal —“ahora ganas porque tienes un entrenador de verdad”— puede tener más verdad de la que aparenta.

París ha visto renacer a Djokovic. Y si este termina siendo su último Roland Garros, el mensaje está claro: todavía puede ganarlo todo. Porque cuando el partido se complica, cuando el rival vuela, cuando el físico tiembla y el reloj avanza... Djokovic encuentra la forma. Siempre la encuentra.

foto Julien Crosnier / FFT

Carlos Alcaraz sigue firme en su camino hacia un nuevo título en Roland Garros. El español superó una dura prueba ante Ben Shelton para avanzar a los cuartos de final del torneo parisino, en un duelo exigente que puso a prueba su capacidad de adaptación, temple y estrategia. Además, alcanzó un hito significativo: su victoria número 100 en tierra batida.

El segundo sembrado del torneo venció al estadounidense, decimotercer cabeza de serie, por 7-6 (10-8), 6-3, 4-6 y 6-4, en un partido de tres horas y 19 minutos que comenzó por la tarde y se extendió hasta entrada la noche en la Philippe-Chatrier.

Alcaraz volvió a demostrar por qué es considerado el mejor tenista del momento en arcilla. Aunque por momentos dejó de lado su habitual espectacularidad, supo sufrir, adaptarse y ganar. En los Grand Slams, no siempre se trata de brillar, sino de avanzar. Y el murciano cumplió.

Shelton, que se aferra a su poderoso servicio y a un efectivo drop-shot, exigió al español y le arrebató un set, pero no fue suficiente. El estadounidense, que ya había caído dos veces antes ante Alcaraz, sumó su tercer revés ante el murciano, quien se mostró letal en los momentos de presión.

La batalla comenzó con un vibrante primer set, que se alargó hasta el desempate y duró 65 minutos. Shelton mostró todo su arsenal, incluido un servicio que alcanzó los 230 km/h y una derecha paralela con la que hizo daño. Alcaraz, sin embargo, no perdió la calma pese a estar 4-1 abajo en el tiebreak. Recuperó el minibreak con un puntazo tras una resbalada de Shelton y salvó hasta tres bolas de set, utilizando el revés del estadounidense como blanco estratégico.

Ya en el segundo set, Shelton tuvo seis oportunidades de quiebre en el juego inicial, pero Alcaraz resistió y logró el break decisivo en el sexto juego. El tercero fue para el estadounidense, que logró finalmente quebrar, pero el español respondió de inmediato. El cuarto set, nuevamente igualado, se rompió a favor de Alcaraz con dos tiros consecutivos al revés de Shelton, clave durante todo el encuentro.

Más allá del talento, Alcaraz dejó claro que su fortaleza mental también marca la diferencia. “Hoy luché contra mí mismo, contra la mente. Solo intenté calmarme. A veces estaba furioso conmigo mismo, pero logré que esos pensamientos no me perjudicaran”, confesó tras el encuentro.

Alcaraz se medirá ahora con otro estadounidense, Tommy Paul, quien venció a Alexei Popyrin con autoridad (6-3, 6-3, 6-3) para convertirse en el primer jugador de su país en alcanzar los cuartos de final de Roland Garros desde André Agassi en 2003. El español domina el historial ante Paul por 4-2.

Con títulos ya este año en Montecarlo y Roma, Carlos Alcaraz apunta a su tercer trofeo en tierra batida de 2025 y al segundo en Roland Garros. Su tenis sigue mezclando potencia, imaginación y madurez táctica. El objetivo está claro, y el murciano parece preparado para todo.

foto @rolandgarros (X)

Iga Swiatek, quinta del ranking WTA, firmó una de las victorias más memorables de su carrera al remontar un partido que parecía perdido ante Elena Rybakina (11ª) para avanzar a los cuartos de final de Roland Garros 2025. En un duelo electrizante disputado en la Philippe Chatrier, la polaca revirtió una situación límite y se impuso por 1-6, 6-3 y 7-5 en 2 horas y 32 minutos, estirando a 25 su racha de triunfos consecutivos en el Grand Slam parisino.

La kazaja mostró una versión arrolladora desde el comienzo, dominando con potencia y precisión desde el fondo de la cancha. En apenas 20 minutos, se adelantó 5-0, y con su servicio cerró el primer set 6-1, generando desconcierto total en la vigente campeona, quien acumuló 27 errores no forzados en los primeros nueve juegos del encuentro.

Swiatek, visiblemente frustrada, reconoció luego que se sintió superada por completo: “Fue como jugar contra Jannik Sinner. Todo le entraba, no había peloteos largos, y no veía forma de revertirlo”, confesó la ganadora de cuatro títulos en París.

El panorama lucía oscuro para Swiatek, quien incluso comenzó el segundo parcial cediendo su servicio. Sin embargo, un bajón en la intensidad de Rybakina, sumado a la paciencia y capacidad de ajuste táctico de la polaca, cambiaron el rumbo del partido. Swiatek recuperó confianza desde el fondo, afinó su derecha y empezó a dominar los intercambios largos, forzando el tercer set tras imponerse 6-3.

El último parcial fue una montaña rusa emocional y tenística. Ambas jugadoras intercambiaron quiebres hasta el 4-4. Rybakina llegó a estar a un paso de romper la racha de la polaca, pero Swiatek se aferró al partido con un saque en blanco y un último quiebre decisivo. Cerró con autoridad, apoyada en su golpe de derecha, dejando en claro por qué es la reina de la arcilla.

"Este triunfo significa muchísimo para mí. Necesitaba saber que podía ganar bajo presión, incluso cuando las cosas no van bien", declaró emocionada tras el partido.

En conferencia de prensa, Rybakina valoró su nivel pese a la derrota: “Jugué a un nivel muy alto. Me quedo con lo positivo: sé que puedo jugar así, ahora debo encontrar más regularidad”. La kazaja, que venía de ser campeona en Estrasburgo, mostró destellos de su mejor versión, la misma que la llevó a conquistar Wimbledon 2022 y otros grandes títulos en años recientes.

Swiatek se enfrentará en cuartos de final a Elina Svitolina, decimotercera preclasificada, quien eliminó a Jasmine Paolini salvando tres puntos de partido. La polaca lidera el historial 3-1 ante la ucraniana, con su única derrota registrada en Wimbledon 2023. En tierra batida, el único antecedente fue en Roma 2021, con victoria para Swiatek.

La número cinco del mundo buscará convertirse en la primera jugadora en la historia en ganar Roland Garros cuatro años consecutivos (2022-2025). A pesar de no haber conquistado ningún título esta temporada, su rendimiento en París sigue siendo imperial: ostenta un asombroso récord de 39 victorias y solo 2 derrotas en este torneo.

foto @rolandgarros (X)

La número uno del mundo, Aryna Sabalenka, dio un nuevo paso en su firme búsqueda del título en Roland Garros 2025. La tenista bielorrusa impuso condiciones ante una exigente Amanda Anisimova y la derrotó por 7-5 y 6-3, accediendo así a los cuartos de final del Grand Slam parisino por tercera vez en su carrera.

A pesar de enfrentar a una rival que históricamente le ha causado problemas —la estadounidense aún domina el historial directo con marca de 5-3—, Sabalenka se mostró sólida y resolutiva, estirando a diez su racha de presencias consecutivas en cuartos de final de un Grand Slam, una muestra clara de su consolidación en la élite del circuito WTA.

Sabalenka no ha perdido un solo set en lo que va del torneo, y si bien Anisimova logró arrebatarle cinco juegos en la primera manga —algo que ninguna otra rival había conseguido en esta edición—, la bielorrusa supo reaccionar con temple y contundencia en los momentos clave.

Desde el US Open 2022, la campeona vigente del Abierto de Australia y del US Open ha sido una constante en las etapas definitorias de los grandes torneos, con la única excepción de Wimbledon 2024, donde no compitió. Esa regularidad es ahora el sostén de su candidatura a levantar su primer trofeo en la tierra batida parisina.

En la siguiente ronda, Sabalenka se medirá con la china Zheng Qinwen (8ª preclasificada), reciente campeona olímpica y quien llega con confianza tras eliminar en tres sets a Liudmila Samsonova. Qinwen, además, derrotó a Sabalenka hace unas semanas en Roma, por lo que el duelo en cuartos promete ser electrizante: será un enfrentamiento de revancha, con tintes de gran final anticipada.

Curiosamente, a pesar de su estatus de máxima favorita, Sabalenka volvió a ser asignada a la cancha Suzanne-Lenglen, en lugar del estadio Philippe-Chatrier, algo que comentó con sinceridad en conferencia de prensa.

“Claro que preferiría jugar en la cancha principal, pero entiendo que no todos consiguen entradas para ese estadio. Está bien jugar frente a un público diferente. Aun así, espero que los próximos partidos sean en la Philippe-Chatrier, creo que allí es donde debemos estar”, expresó Sabalenka.

La jugadora de 27 años, oriunda de Minsk, explicó que hoy se siente mucho más segura sobre polvo de ladrillo que en años anteriores, en gran parte por la evolución de su juego y su mentalidad competitiva.

“El año pasado todavía dudaba de mí misma en esta superficie. Hoy ya no. Sé que puedo ganar Roland Garros”, aseguró.

Sabalenka ha sabido trasladar su potencia natural a una versión más completa y táctica de su tenis, una evolución que la tiene como firme candidata a cortar la racha dominante de Iga Swiatek en París.

A la espera de su duelo ante Zheng, la bielorrusa mantiene la convicción y el deseo de conquistar el único Grand Slam que aún le falta. Por lo pronto, su paso por Roland Garros 2025 sigue siendo perfecto.

foto André Ferreira / FFT

El campeón defensor Carlos Alcaraz continúa con paso firme en Roland Garros, aunque no sin dificultades. El murciano de 22 años se impuso por 6-1, 6-3, 4-6 y 6-4 al bosnio Damir Dzumhur en un exigente duelo de tercera ronda celebrado en la sesión nocturna del viernes en la cancha Philippe-Chatrier.

El español, segundo cabeza de serie del torneo, dominó con autoridad los dos primeros parciales, pero encontró una resistencia inesperada a partir del tercero, cuando su rival elevó el nivel de su juego con golpes más profundos y agresivos. A pesar de ello, Alcaraz supo recuperar el control del partido tras ceder el tercer set y firmó su pase a octavos de final en 3 horas y 14 minutos de acción.

“Sufrí bastante hoy”, admitió Alcaraz al término del encuentro. “Los dos primeros sets estuvieron bajo control, pero luego él empezó a jugar mejor y se volvió muy difícil”.

El partido también estuvo marcado por las molestias físicas de Dzumhur, quien se resintió de la rodilla izquierda tras una caída y requirió asistencia médica en ambas piernas. Pese a su visible desgaste, el bosnio —que nunca ha superado la tercera ronda en un Grand Slam— se ganó los aplausos del público con gestos técnicos destacados, como un espectacular smash desequilibrado, y por su combatividad al llevarse el tercer set y romper el saque del español en el arranque del cuarto.

Sin embargo, Alcaraz mostró su temple en los momentos clave, recuperando el quiebre en los juegos sexto y octavo del último set, hasta cerrar el partido en su segundo punto de partido.

El número 2 del mundo buscará el pase a cuartos de final este domingo ante el estadounidense Ben Shelton, 13º preclasificado, quien venció con solidez al italiano Matteo Gigante por 6-3, 6-3 y 6-4 en la cancha Simonne-Mathieu.

Con esta clasificación, Shelton se une a Tommy Paul y Frances Tiafoe para conformar un trío estadounidense en octavos de final de Roland Garros, algo que no ocurría desde 1995. Si el clasificado Ethan Quinn consigue avanzar, será la primera vez desde 1991 que cuatro hombres de Estados Unidos alcanzan la segunda semana del torneo en París.

foto Jimmie48/WTA (X)

En su superficie predilecta y sobre la Philippe Chatrier, Iga Swiatek volvió a mostrar su mejor versión. La vigente campeona de Roland Garros dio una verdadera exhibición de tenis y se deshizo con contundencia de Emma Raducanu por 6-1 y 6-2 en apenas una hora y 19 minutos de juego. La número 5 del mundo dejó claro que su irregularidad en la gira de arcilla ha quedado atrás y lanza un mensaje claro al resto del circuito: en París, ella manda.

Swiatek fue una aplanadora desde el arranque, dominando todos los aspectos del juego. Sumó 32 golpes ganadores frente a los apenas ocho de Raducanu, que nunca encontró respuestas ante la solidez y agresividad de la polaca. En un ambiente entregado al espectáculo que ofreció la ex número uno del mundo, Swiatek dejó claro por qué es considerada una de las grandes dominadoras del circuito femenino.

Con esta victoria, la polaca alcanzó las 90 victorias en torneos de Grand Slam en tan solo 109 partidos, una cifra que la consolida como una de las jugadoras más eficaces en la historia reciente. Solo la legendaria Monica Seles logró ese registro en menos encuentros (97).

Además, Swiatek mantiene viva una racha impresionante: ha alcanzado al menos la tercera ronda en cada uno de los 21 Grand Slams disputados desde 2020, convirtiéndose en la única jugadora con ese récord en la presente década. En ese periodo, ha sumado cinco títulos de Major, incluidos cuatro Roland Garros y un US Open.

El triunfo sobre Raducanu —ex campeona del US Open que no ha logrado consolidarse en la élite desde su irrupción en 2021— representa la vigésima tercera victoria consecutiva de Swiatek en Roland Garros, una muestra más del idilio que vive con la tierra batida parisina.

Ahora, la polaca aguarda rival para su duelo de tercera ronda, que saldrá del enfrentamiento entre la checa Sara Bejlek (188ª del ranking) y la rumana Jaqueline Cristian (60ª). Con su tenis en alza, Swiatek se perfila una vez más como gran candidata a levantar la copa Suzanne-Lenglen.

foto Getty IMages

París, 28 de mayo de 2025. Carlos Alcaraz dio un nuevo paso en la defensa de su título en Roland Garros al imponerse con autoridad al húngaro Fabian Marozsan por 6-1, 4-6, 6-1 y 6-2, en un duelo disputado en la Philippe-Chatrier. El número dos del mundo necesitó dos horas y 11 minutos para sellar su pase a la tercera ronda, en la que enfrentará al vencedor del duelo entre Giovanni Mpetshi Perricard (37º) y Damir Dzumhur (69º).

El murciano, actual campeón del Abierto de Francia y con apenas 22 años, volvió a dejar destellos de su clase: arranques demoledores, momentos de desconexión y, sobre todo, una mentalidad férrea que le permite imponerse incluso en situaciones adversas. Marozsan, 56º del ranking ATP, aprovechó un bajón del español en el segundo set para empatar el partido, pero no pudo sostener ese nivel frente a la solidez y la capacidad de reacción de Alcaraz, quien firmó 41 golpes ganadores y apenas 25 errores no forzados.

Con este triunfo, el español alcanza su vigésima victoria en Roland Garros en solo 23 encuentros, convirtiéndose en el primer tenista nacido en el siglo XXI en lograr dicha marca en el Grand Slam parisino. Además, tomó ventaja en el historial ante Marozsan (2-1), cobrando revancha de la sorpresiva derrota sufrida en Roma 2023.

El inicio del encuentro fue una declaración de intenciones por parte de Alcaraz, quien desbordó a su rival con un tenis vibrante, repleto de agresividad, precisión y variedad. La pista cubierta favoreció el toque y la sensibilidad del murciano, quien no concedió margen alguno en el primer set, ganado por 6-1 con once tiros ganadores.

Pero el guion cambió en el segundo parcial. Marozsan elevó su nivel, aumentó su porcentaje de primeros servicios y recurrió a una estrategia de ritmo cambiante, con dejadas y subidas a la red que pusieron a prueba al español. El húngaro se llevó ese set por 6-4, mostrando el tenis que lo ha hecho merecedor del apodo de “matagigantes”.

Sin embargo, lo que distingue a los grandes campeones es la capacidad para recomponerse. Lejos de dejarse llevar por la frustración, Alcaraz retomó el control desde la tercera manga, imponiendo un tenis más consistente y una actitud irreprochable. Marozsan, sin la solidez ni la frescura necesarias para sostener el pulso, cedió los dos siguientes sets con claridad.

"Empecé muy bien, con mucha confianza, pero en el segundo set él subió el nivel y fue más difícil", declaró Alcaraz tras el encuentro. “Estoy contento de haber recuperado el control y de seguir avanzando”.

El joven español continúa forjando su camino en la historia del tenis. Esta temporada sobre tierra batida acumula un impresionante récord de 17-1, siendo su única derrota en el torneo de Barcelona. Con títulos recientes en Montecarlo y Roma, Alcaraz se perfila como el gran favorito a revalidar su título en París y seguir los pasos de Rafael Nadal, el último en defender con éxito la corona en 2019 y 2020.

De momento, Carlos avanza con paso firme y convencido de su juego. Dejarse un set en el camino no empaña su rendimiento; al contrario, refuerza su imagen de luchador incansable y campeón en construcción.

Foto EFE

Jack Draper confirmó su excelente momento en el circuito con una sólida remontada en su estreno en Roland Garros 2025. El británico, actual número cinco del mundo y uno de los nombres más en forma del año, se impuso al italiano Mattia Bellucci (68º del ranking ATP) por 3-6, 6-1, 6-4 y 6-2, en un duelo de dos horas y 37 minutos disputado en la cancha Suzanne Lenglen.

Conocido por su potencia y apodado "Jack el Destripador", Draper comenzó errático y cedió el primer set ante un Bellucci agresivo y sin complejos. Sin embargo, el británico reaccionó con firmeza, elevando su nivel desde el fondo de la pista, imponiendo su ritmo y dominando con el saque (11 aces y seis quiebres en 18 oportunidades).

Este triunfo no solo le permite instalarse en la segunda ronda, donde se medirá con el vencedor del duelo entre Gael Monfils y Hugo Dellien, sino que consolida su candidatura como uno de los aspirantes serios al título en París. Draper viene de conquistar Indian Wells y alcanzar la final del Masters 1000 de Madrid, y podría cruzarse con Jannik Sinner en unos hipotéticos cuartos de final.

La jornada también trajo victorias convincentes para otros miembros del Top-10. Alexander Zverev (3º), Novak Djokovic (6º) y Alex de Miñaur (9º) avanzaron sin ceder sets, en una jornada que reafirmó la presencia de los favoritos en la parte alta del cuadro.

foto Nicolas Gouhier / FFT

Jannik Sinner continúa intratable en los escenarios más grandes del tenis. El número uno del mundo debutó con victoria en Roland Garros tras imponerse al francés Arthur Rinderknech por 6-4, 6-3 y 7-5, sumando su 15° triunfo consecutivo en torneos de Grand Slam, una racha que inició con sus títulos en el US Open 2024 y el Abierto de Australia 2025.

Sinner, de 23 años, dominó los dos primeros sets con autoridad, combinando 19 tiros ganadores y apenas ocho errores no forzados. En el tercero, Rinderknech —apoyado por el público de la Philippe Chatrier— logró colocarse 5-2 arriba y dispuso de punto para el 5-0. Sin embargo, el italiano reaccionó con temple, ganó cinco juegos consecutivos y cerró el duelo en sets corridos.

“Estoy muy orgulloso de este triunfo. Jugar ante un francés en París nunca es sencillo”, comentó Sinner tras el partido. “Él elevó su nivel y yo cometí algunos errores, pero en el tenis todo puede cambiar muy rápido, como se vio hoy”.

La victoria fue la número 62 de Sinner ante rivales fuera del Top 20, consolidando su hegemonía en ese tipo de enfrentamientos. En segunda ronda, se medirá a Richard Gasquet, veterano de 38 años que disputa en Roland Garros el último torneo de su carrera.