Foto: Ed Mulholland-Imagn Images

La temporada 2025 de los New York Jets, que ya se tambaleaba, colapsó oficialmente este domingo en una tarde de miseria en el MetLife Stadium. En un partido que expuso todas las fracturas de la franquicia, los Jets fueron atropellados 31-10 por sus rivales divisionales, los Miami Dolphins, un resultado que selló su destino: eliminados de la contienda por los playoffs.

La eliminación marca un hito oscuro. Los Jets han extendido su sequía sin postemporada a 15 años consecutivos, estableciendo la racha activa más larga de futilidad en los principales deportes profesionales de América del Norte.

"Este juego fue definitivamente decepcionante. Realmente es difícil tratar de poner esto en palabras", admitió el entrenador en jefe Aaron Glenn. "No tuve a estos muchachos listos para jugar. Eso fue obvio por la forma en que salimos y jugamos".

El plan de juego de los Jets se desmoronó casi de inmediato. El mariscal de campo veterano Tyrod Taylor, quien realizaba su tercera titularidad consecutiva tras la banca de Justin Fields, abandonó el partido a finales del primer cuarto con una lesión en la ingle y no regresó.

En una decisión que sorprendió a muchos, en lugar de recurrir a Fields, el equipo dio entrada al novato no drafteado Brady Cook para su debut en la NFL. El producto de Missouri tuvo una tarde para el olvido, completando solo 14 de 30 pases para 163 yardas. Cook fue interceptado dos veces en la zona de anotación rival, matando cualquier esperanza de remontada. La ofensiva de los Jets generó unas paupérrimas 207 yardas totales.

La única chispa de vida para los locales provino de los equipos especiales, cuando Isaiah Williams devolvió un despeje 78 yardas para touchdown, el único momento de celebración en una tarde sombría.

Mientras la ofensiva de Nueva York se estancaba y su defensa sufría las recientes salidas de estrellas como Sauce Gardner y Quinnen Williams, los Dolphins hicieron lo que quisieron por tierra.

Miami acumuló 239 yardas terrestres, superando por sí solos la producción ofensiva total de los Jets. Jaylen Wright lideró la carga con un récord personal de 107 yardas. De’Von Achane añadió 92 yardas y un touchdown en solo siete acarreos antes de salir con una lesión en las costillas, y el novato Ollie Gordon II también anotó por tierra.

Tua Tagovailoa tuvo una tarde eficiente (13/21, 127 yardas, 1 TD a Jaylen Waddle) y mejoró su récord personal a un perfecto 7-0 contra los Jets como titular, demostrando que puede ganar en clima frío.

Los Dolphins, que han ganado cuatro juegos seguidos para mejorar a 6-7, añadieron un toque final de humillación a sus rivales. Para la última serie ofensiva del partido, enviaron al campo a Zach Wilson, el ex mariscal de campo de los Jets y segunda selección global del draft de 2021, para cerrar la victoria en el estadio que alguna vez fue su hogar.

Foto: ESPN

De'Von Achane se convirtió en el héroe indiscutible de los Miami Dolphins al correr para 134 yardas y un touchdown en 22 acarreos, superando por primera vez en su carrera las 1,000 yardas en una temporada (1,034 totales), para guiar a su equipo a una victoria sufrida pero clave por 21-17 ante los New Orleans Saints y extender su racha ganadora a tres juegos. Miami (5-7) mantiene vivas sus remotas aspiraciones de playoffs en la AFC Este, detrás de New England y Buffalo, mientras los Saints (2-10) suman su sexta derrota en siete partidos con una ofensiva que apenas generó 63 yardas en la primera mitad.​

Achane abrió el marcador apenas en la primera serie ofensiva con una corrida explosiva de 29 yardas para su décimo TD de la temporada, aprovechando bloqueos perfectos de Austin Jackson, Alec Ingold y Julian Hill que desarmaron a la defensa de New Orleans. Los Dolphins acumularon 164 yardas por tierra totales —primera vez desde 2022 con tres juegos consecutivos sobre 160—, promediando 5.6 yardas por acarreo gracias al corredor que "hizo fácil su trabajo" ante un cornerback que se sobreextendió. Riley Patterson aportó tres field goals (incluyendo uno de 56 yardas a 6:08 del final para el 19-11), mientras Tua Tagovailoa lució irregular con 12/23 para 157 yardas y una intercepción, empatando su récord personal de 14 picks esta temporada.​

New Orleans, con la segunda peor ofensiva anotadora de la NFL, despertó en el arranque del tercer cuarto con un drive de 10 jugadas y 70 yardas culminado por un pase de 17 yardas de rookie Tyler Shough a Chris Olave, seguido de una conversión de dos puntos en carrera del QB para el 16-8. Shough, pese a un primer tiempo desastroso con intercepción y strip sack, finalizó con 239 yardas y dos TDs, incluyendo uno de 15 yardas a Devaughn Vele a 1:17 del final para el 19-17.​

En la conversión de dos puntos, Minkah Fitzpatrick interceptó a Shough y devolvió 98 yardas para dos puntos defensivos, ampliando a 21-17. Los Saints recuperaron el onside kick de Charlie Smyth —exjugador de fútbol gaélico de Irlanda del Norte en su debut NFL regular—, pero la defensa de Dolphins paró a Shough en 4th-and-1 desde la 36 de Miami, sellando el triunfo. Jaylen Waddle fue clave en el cuarto con una ganancia de 22 yardas que preparó el field goal de Patterson de 33 yardas.​

foto: AP Photo/Lynne Sladky

Los Miami Dolphins pusieron fin a una racha de siete derrotas consecutivas ante los Buffalo Bills con una victoria contundente de 30-13, destacando una actuación sobresaliente de su mariscal Tua Tagovailoa y el corredor De’Von Achane. Tagovailoa lanzó para 173 yardas y dos touchdowns, completando 15 de 21 pases, aunque sufrió dos intercepciones que lo mantienen como líder de la NFL en este apartado con 12 en la temporada.

De’Von Achane fue clave con un total de 225 yardas y dos anotaciones terrestres de 59 y 35 yardas en el último cuarto, mostrando explosividad y control del balón. La defensa de Miami también brilló, logrando tres balones recuperados y tres capturas, limitando a Buffalo a solo 13 puntos a pesar de que Josh Allen lanzó para 306 yardas y dos touchdowns, pero con errores que incluyeron una intercepción y un balón suelto que resultaron críticos para el resultado.

Tagovailoa lideró dos series de touchdown que pusieron a Miami con ventaja de 13-0, la mayor sobre Buffalo desde 2016, y el gol de campo de 46 yardas de Riley Patterson extendió la ventaja a 16-0, creando el mayor déficit para los Bills en la primera mitad desde su derrota ante Baltimore la temporada pasada. Con esta victoria, los Dolphins mejoran su marca a 3-7 y se alejan un poco en la complicada pelea divisional contra equipos como New England y Buffalo.

foto AP/Rebecca Blackwell

Los Baltimore Ravens lograron una victoria sólida de 28-6 sobre los Miami Dolphins en el Hard Rock Stadium durante el Thursday Night Football de la Semana 9 de la NFL, en un esperado regreso de Lamar Jackson tras tres juegos fuera por una lesión en el tendón de la corva.

Jackson mostró su mejor versión completando 18 de 23 pases para 204 yardas y cuatro envíos de touchdown, conectando dos veces con Mark Andrews en jugadas de 2 y 20 yardas, además de encontrar en la zona de anotación a Charlie Kolar y Rashod Bateman. El corredor Derrick Henry fue pieza clave con 119 yardas por tierra, aportando la estabilidad necesaria para mantener el control ofensivo total del equipo.

Miami inició anotando un gol de campo de 49 yardas por parte de Riley Patterson, tras una serie ofensiva impulsada por Tua Tagovailoa y Jaylen Waddle, pero pronto mostró sus limitaciones. El equipo sufrió errores en momentos críticos y penalizaciones que frenaron sus avances, especialmente dentro de la zona roja de Baltimore. La frustración se hizo evidente, con bochornosos abucheos de la afición y un vaciado progresivo de las gradas en el último cuarto.

En contraposición, Baltimore aprovechó cada error de los Dolphins y mantuvo cierres efectivos. La ofensiva de los Ravens recuperó consistencia luego de una primera mitad irregular, combinando pases y carreras que desgastaron a la defensa rival. Destacaron también los novatos: Malaki Starks, primera selección de los Ravens, interceptó un pase profundo de Tagovailoa, mientras el safety Alohi Gilman forzó un fumble decisivo convertido en touchdown. Estas jugadas reflejan la profundidad y el talento emergente en Baltimore.

La ofensiva de Miami volvió a fallar en momentos clave, con un fumble de Malik Washington y varias penalizaciones que arruinaron oportunidades importantes. La falta de precisión entre Tua Tagovailoa y Jaylen Waddle se convirtió en un lastre constante.

El triunfo renueva el impulso de Baltimore y su identidad ofensiva cuando Jackson está en el campo. Para Miami, la derrota profundiza sus problemas estructurales y aumenta la presión sobre su cuerpo técnico y jugadores para revertir la situación en la División Este de la Conferencia Americana.

foto @Colts (X)

El debut de los Miami Dolphins en la temporada 2025 de la NFL no fue el esperado, al perder de forma contundente 33-8 ante los Indianapolis Colts en el Lucas Oil Stadium de Indiana. Esta derrota puso fin a la racha ganadora previa de cuatro juegos consecutivos y evidenció graves problemas tanto en la ofensiva como en la defensa de Miami.

Los Dolphins sufrieron especialmente en defensa, con una secundaria débil y una línea que permitió 156 yardas terrestres. Los linebackers apenas lograron un solo sack sobre el quarterback rival Daniel Jones, quien tuvo una actuación destacada al lanzar para 272 yardas y anotar un touchdown aéreo además de dos por tierra. La ofensiva de Miami también fue incapaz de generar juego fluido; la línea ofensiva permitió tres sacks al quarterback Tua Tagovailoa, quien lanzó dos intercepciones y completó solo 14 de 23 pases para 114 yardas. El único touchdown de Miami fue de De'Von Achane con una carrera de 55 yardas.

El marcador fue reflejo del dominio local, con los Colts anotando rápidamente con un gol de campo de Spencer Shrader y dos touchdowns de Jones, uno de ellos en carrera. Miami no pudo acercarse hasta el último cuarto, cuando Achane evitó el blanqueo con un acarreo y conversión de dos puntos. Los Colts ampliaron su ventaja con otro gol de campo para cerrar.

La derrota dejó en evidencia la falta de agresividad y cohesión en los Dolphins, quienes necesitarán ajustar para evitar un inicio de campaña difícil. Su próximo partido será el 14 de septiembre en casa contra los New England Patriots, donde se espera una reacción.

foto Rebecca Blackwell

Los Miami Dolphins cerraron su pretemporada con una sólida victoria de 14-6 sobre los Jacksonville Jaguars en el Hard Rock Stadium, alcanzando un récord de 2-0-1 que refleja buen potencial para la temporada regular.

Aunque varios jugadores clave como Tyreek Hill, De’Von Achane y Austin Jackson se ausentaron por lesión, Miami contó con la presencia de Tua Tagovailoa, Jaylen Waddle, Bradley Chubb y Jaelan Phillips, quienes lideraron al equipo en ambas áreas del campo.

El partido comenzó con dificultad para la ofensiva titular de Miami, con Tagovailoa enfrentando presión y siendo capturado en dos ocasiones. Larry Borom, sustituto de Jackson en la línea ofensiva, tuvo problemas para contener la defensa rival. Sin embargo, la defensa de Miami se destacó, limitando a Jacksonville a 190 yardas totales y forzando tres despejes en el primer cuarto, apoyada por capturas combinadas de Phillips y Chubb.

Miami abrió el marcador con una marcha ofensiva de nueve jugadas y 61 yardas, culminando con un pase de 25 yardas de Tagovailoa a Malik Washington, quien anotó el touchdown tras sortear con habilidad al linebacker Chad Muma. Miami intentó un par de conversiones de dos puntos debido a la lesión del pateador Jason Sanders.

Jacksonville respondió con dos goles de campo antes del medio tiempo, aprovechando una captura sobre el mariscal suplente Zach Wilson para mantener el partido cerrado.

En la segunda mitad, Wilson lideró un drive que terminó en touchdown por carrera de siete yardas de Mike Boone, extendiendo la ventaja de Miami a 14-6. Aunque intentaron más anotaciones, un gol de campo fallido en el último cuarto mantuvo la diferencia segura.

Un momento clave fue la intercepción del novato safety John Saunders Jr. en los minutos finales, que cortó un intento de los Jaguars de acercarse en el marcador.

Del lado ofensivo, Tagovailoa tuvo un desempeño que mostró problemas de sincronización con sus receptores, aunque completó 4 de 8 pases para 49 yardas y un touchdown. Malik Washington y el corredor Ollie Gordon destacaron como principales contribuyentes ofensivos.

En resumen, los Dolphins mostraron un balance positivo en sus dos líneas, destacándose una defensa sólida y una ofensiva que promete mejorar conforme avanza la preparación para la temporada regular.

foto Paul Sancya

Después de dos prácticas conjuntas en Allen Park, los Detroit Lions cerraron su segunda semana de pretemporada enfrentándose a los Miami Dolphins en Ford Field, en un partido que terminó con victoria para Miami por 24-17 ante una multitud entusiasta.

El ataque terrestre fue la base del triunfo de Detroit, que contó con anotaciones por acarreo de Israel Abanikanda, Amar Johnson y Sean Clifford. Abanikanda lideró con 12 acarreos para 43 yardas. Mark McNamee añadió un gol de campo de 43 yardas, clave para la primera victoria de los Packers en la pretemporada. Los Lions remontaron 13 puntos de desventaja, demostrando carácter y competitividad para buscar su lugar en la plantilla final. Por el lado de Indiana, Tyler Goodson anotó una carrera de tres yardas y Spencer Shrader aportó cuatro goles de campo.

El incidente más lamentable fue la lesión del liniero ofensivo Blake Freeland, que sufrió una fractura en la pierna derecha al inicio del segundo cuarto y tuvo que ser retirado en camilla, un golpe duro para los Colts.

En el duelo de mariscales, Taylor Elgersma comandó a los Packers con 7 pases completos de 11 intentos para 109 yardas, mientras Malik Willis completó 6 de 14 para 83 yardas. Por los Colts, Daniel Jones tuvo 7 de 11 para 101 yardas y Anthony Richardson Jr. relevó con 6 de 11 para 73 yardas.

Destacan también las buenas actuaciones de los corredores Craig Reynolds, Sione Vaki y Jacob Saylors para los Lions, con carreras elusivas y potentes, y la emergencia de jóvenes receptores como Isaac TeSlaa, quien capturó cuatro pases y anotó dos touchdowns en la pretemporada, demostrando ser una pieza valiosa para el ataque.

La defensa de Detroit estuvo activa, con jugadores como Nick Whiteside haciendo jugadas importantes que podrían ganarle un puesto en el equipo final, y el veterano pateador Jack Fox mantuvo su nivel con promedios superiores a 40 yardas en sus despejes, ayudando a controlar el campo.

Por Miami, los mariscales Zach Wilson y Quinn Ewers mostraron buena química y efectividad, con Wilson pasando para 151 yardas y un touchdown, y Ewers conectando dos touchdowns en la segunda mitad que resultaron decisivos. El entrenador Mike McDaniel destacó el desempeño de ambos y mencionó que la competencia por la titularidad está abierta y que analizarán el rendimiento con calma.

En el último minuto, Detroit tuvo una oportunidad para empatar o ganar con una serie ofensiva liderada por Elgersma, pero un pase fue interceptado por Ethan Robinson, sellando la victoria de Miami.

Este duelo fue un vistazo valioso para ambos equipos sobre su profundidad y talento joven en un partido donde la intensidad aumentó en la segunda mitad y quedó claro que los jugadores luchan por cada oportunidad de estar en la plantilla.

foto AP/Erin Hooley

Los Chicago Bears y Miami Dolphins ofrecieron un emocionante encuentro de pretemporada NFL 2025, que culminó en un empate 24-24 en el Soldier Field de Chicago. Este resultado, aunque no refleja puntos en la tabla oficial de temporada regular, dejó destellos prometedores y algunas dudas por resolver para ambos equipos en la recta final de sus preparativos.

Miami dominó la primera mitad, apoyado en un efectivo juego terrestre que logró dos touchdowns gracias a los acarreos de Alexander Mattison y Jaylen Wright. La ofensiva mostró fluidez y capacidad para avanzar, mientras que defensivamente forzaron varias paradas clave frente a un equipo de Chicago que batalló por mantener el ritmo.

Por parte de los Bears, la reacción llegó principalmente a través del juego aéreo. Case Keenum, con experiencia y liderazgo, aportó dos pases de anotación — primero a Deion Hankins y luego a Jahdae Walker — que dieron vuelta temporalmente el marcador. Tyson Bagent también tuvo protagonismo temprano, conduciendo una conexión clave con Maurice Alexander para un touchdown fundamental.

Un punto destacado del partido fue el regreso de Tua Tagovailoa con los Dolphins, su primera aparición en pretemporada desde 2021. Aunque solo dirigió una serie, completó 5 de 6 pases para 27 yardas con una eficiente calificación como pasador. Su presencia renovó expectativas en Miami sobre la salud y capacidad de su quarterback titular para la próxima temporada.

El último minuto fue vibrante con un gol de campo de 56 yardas de Cairo Santos para los Bears, que les permitió igualar el encuentro tras la ventaja momentánea de Miami. La defensa de ambos conjuntos mostró intensidad, aunque cometieron errores puntuales que evitaron que alguno de los dos equipos asegurara el triunfo.

A nivel individual, la lesión de Alexander Mattison en el último cuarto — tras una sólida actuación — es un punto de preocupación para Miami, dado su rol importante en el esquema ofensivo.

En conclusión, este empate refleja un partido disputado con muestras tanto de talento veterano como novedades alentadoras, pero también con áreas donde ambos equipos deben mejorar. Los Dolphins se muestran con un mariscal recuperado y profundidad ofensiva, mientras que los Bears expusieron agresividad ofensiva que puede ser valiosa para una campaña desafiante.

foto Gabe's Collision

En un partido que marcó el inicio de la Semana 2 de la NFL, los Buffalo Bills superaron con contundencia a los Miami Dolphins 31-10 en el Hard Rock Stadium. La figura indiscutible fue el running back James Cook, quien protagonizó una actuación memorable al sumar tres touchdowns que prácticamente sentenciaron el juego en la primera mitad. El mariscal de campo de los Dolphins, Tua Tagovailoa, tuvo que abandonar el encuentro tras sufrir una conmoción cerebral en el tercer cuarto, dejando a su equipo en manos de Skylar Thompson, quien no pudo revertir el marcador.

El inicio del partido fue parejo, con ambos equipos intercambiando anotaciones rápidas. James Cook abrió el marcador para los Bills con un pase de Josh Allen, seguido de la respuesta inmediata de los Dolphins con un touchdown de De'Von Achane tras un pase de Tagovailoa. Sin embargo, a partir de ahí, los Bills tomaron el control. Un gol de campo de 43 yardas de Tyler Bass y dos touchdowns más de Cook, uno de ellos tras un acarreo de 49 yardas, consolidaron una ventaja inalcanzable para Miami.

El golpe más duro para los Dolphins llegó en el tercer cuarto cuando Tagovailoa fue derribado por Damar Hamlin, quedando brevemente inconsciente. Aunque pudo salir del campo por su propio pie, su salida marcó un punto de quiebre para el equipo local. Josh Allen, aunque tuvo una actuación discreta con 139 yardas y un pase de touchdown, gestionó con inteligencia el partido y mantuvo a los Bills en control durante toda la noche.

Con esta victoria, los Buffalo Bills refuerzan su posición en la AFC Este y se preparan para su próximo encuentro ante los Jacksonville Jaguars. En cambio, los Dolphins enfrentan la incertidumbre de la salud de su mariscal de campo estrella y deberán replantear su estrategia antes de su duelo frente a los Seattle Seahawks.

foto @MiamiDolphins (X)

Los Miami Dolphins obtuvieron una ajustada victoria de 13-6 sobre los Washington Commanders en su segundo partido de pretemporada, con Tua Tagovailoa liderando una ofensiva eficaz en el primer cuarto y una defensa que se mantuvo firme a lo largo del encuentro. A pesar de la ausencia de sus principales receptores, el equipo de Miami mostró un desempeño sólido, especialmente en el aspecto defensivo, que será clave a medida que se acerca el inicio de la temporada regular.

Tua Tagovailoa mostró un notable entusiasmo en su regreso al campo, liderando a los Miami Dolphins con una actuación precisa en el segundo partido de pretemporada contra los Washington Commanders. Desde el primer cuarto, Tua demostró su capacidad para manejar la ofensiva, completando los cinco pases que intentó, acumulando 51 yardas y anotando el único touchdown del juego. Esta sólida actuación permitió a los Dolphins mantener su marca invicta en la pretemporada con un récord de 2-0.

El partido, que tuvo lugar en el Hard Rock Stadium, fue un reflejo de la fortaleza defensiva de ambos equipos. Miami tomó la delantera desde temprano gracias a una conexión de 13 yardas entre Tua y el receptor River Cracraft, quien logró desmarcarse en la zona de anotación para abrir el marcador. Jason Sanders convirtió el punto extra, colocando a los Dolphins 7-0 en el primer cuarto.

Washington respondió en el segundo cuarto con un gol de campo de 46 yardas por parte de Riley Patterson, recortando la distancia a 7-3. Sin embargo, los Dolphins volvieron a ampliar la ventaja con un gol de campo de 39 yardas de Sanders, colocando el marcador 10-3 antes de que Patterson volviera a anotar para los Commanders con otro gol de campo, esta vez de 38 yardas, finalizando la primera mitad con un 10-6 a favor de Miami.

En la segunda mitad, los suplentes de Miami tomaron el control. Skylar Thompson y Mike White se disputaron el puesto de mariscal de campo, pero ninguno logró destacarse de manera significativa. Thompson completó 8 de 15 pases para 61 yardas, mientras que White tuvo un desempeño ligeramente mejor, completando 11 de 20 pases para 116 yardas, incluyendo una importante conexión de 35 yardas con Erik Ezukanma, quien lideró al equipo con 65 yardas recibidas.

La defensa de los Dolphins fue crucial para mantener la ventaja. Cam Smith, antes de salir por lesión, tuvo una destacada actuación con cuatro tackles, mientras que Channing Tindall cerró el partido con una captura clave en los minutos finales, frenando el avance de Washington en la yarda 7 de Miami.

El entrenador Mike McDaniel aprovechó el encuentro para evaluar a los jugadores jóvenes y ajustar las piezas de cara al inicio de la temporada regular. A pesar de la presión constante de Washington, la defensa de Miami logró mantener a raya a los Commanders, asegurando una victoria que, aunque no cuenta para las estadísticas, refuerza la confianza del equipo.