Max Verstappen brilla en Qatar: caos, polémicas y un cierre de temporada lleno de tensión

foto @F1 (X)

 

Max Verstappen volvió a demostrar por qué es uno de los grandes del automovilismo actual, asegurando una sólida victoria en el Gran Premio de Qatar pese a haber perdido la pole position por una penalización. En el Circuito Internacional de Lusail, el piloto de Red Bull lideró con autoridad, resistiendo la presión inicial de Lando Norris y los constantes incidentes que marcaron la carrera, incluyendo tres coches de seguridad y varias penalizaciones clave.

Desde el arranque, Verstappen tomó el control tras superar a George Russell en la primera curva, mientras que Norris se perfilaba como su principal competidor. Sin embargo, el británico vio su estrategia arruinada por una sanción de 10 segundos por no respetar una doble bandera amarilla, relegándolo al décimo puesto a pesar de marcar la vuelta más rápida.

El caos en pista permitió que Charles Leclerc y Oscar Piastri se consolidaran en el podio. Leclerc aprovechó los momentos críticos para asegurar el segundo lugar, mientras que Piastri logró un tercer puesto importante para McLaren, aunque quedó bajo investigación por un incidente en el pit lane.

Por otro lado, los pilotos latinos tuvieron un día para el olvido. Franco Colapinto quedó fuera en un accidente múltiple en la primera vuelta, y Checo Pérez sufrió un trompo y problemas mecánicos que lo obligaron a retirarse en la vuelta 41. Este resultado agrava la complicada temporada del mexicano, marcada por inconsistencias y problemas técnicos.

La competencia también tuvo implicaciones significativas en el campeonato de constructores. Ferrari recortó la ventaja de McLaren a 21 puntos gracias al segundo lugar de Leclerc y los problemas de Norris. Con 44 puntos aún en juego, todo se decidirá en la última prueba de la temporada en Abu Dabi el próximo fin de semana.

Max Verstappen, quien ya aseguró el título de pilotos en el Gran Premio de Las Vegas, suma su novena victoria del año, consolidando una temporada dominante y dejando claro su lugar como referente absoluto de la Fórmula 1.