De ganar los World Games a protagonizar el comercial del Super Bowl.
En Deporte en Rosa nos encanta contar historias de mujeres que no solo rompen techos de cristal, sino que redefinen las reglas del juego. Y si hay alguien que encarna esa fuerza imparable hoy en día, es Diana Flores.
Quizás la viste en el comercial del Super Bowl esquivando leyendas, o coordinando la ofensiva en el Pro Bowl junto a Peyton Manning. Pero Diana es mucho más que una figura mediática de la NFL; es una ganadora nata que acaba de confirmar, una vez más, que es la mejor del mundo.
Hace unos meses, Diana lideró nuevamente a la Selección Mexicana hacia la gloria en los Juegos Mundiales de Chengdú 2025.
No fue fácil. A diferencia de hace tres años, el mundo ya conocía el poderío mexicano. En una final dramática y de infarto contra Estados Unidos, Diana mostró ese temple que solo tienen las elegidas, gestionando la presión para cerrar un marcador de 26-21.
Con este triunfo, Diana no solo refrenda el oro obtenido en Birmingham 2022; consolida un año de ensueño donde también se coronaron campeonas del Americas Flag Football 2025. Es oficial: vivimos en la era de Diana Flores.
Lo que hace especial a Diana para nosotras en Deporte en Rosa no es solo su brazo o su velocidad, sino lo que representa. Mide 1.63 metros, es mexicana y ha obligado a la industria del deporte más poderoso de Estados Unidos a mirarla con respeto y admiración.
Ella ha tomado el Flag Football, un deporte que para muchos era "recreativo", y lo ha puesto en la agenda olímpica para Los Ángeles 2028. Cada vez que Diana se pone el jersey tricolor y levanta un trofeo, el mensaje para miles de niñas latinas es claro: No hay imposibles.
Diana ha demostrado que el liderazgo femenino se ve increíble en el emparrillado. En México se celebra su bicampeonato, pero sobre todo, celebramos que una mexicana sea la cara global de un deporte que no para de crecer.
Hoy, Diana Flores es la embajadora global del Flag Football. Su misión va más allá de los touchdowns; se trata de abrir puertas para la próxima generación de niñas latinas en el deporte. Con el Flag Football confirmado para los Juegos Olímpicos de 2028, la pregunta no es si Diana estará ahí, sino qué color de medalla traerá a casa.
En un mundo dominado por gigantes, la mexicana Diana Flores ha demostrado que la grandeza no se mide en estatura, sino en impacto.
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