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foto @okcthunder (X) |
El Thunder está a un paso de hacer historia. Con una actuación magistral de Jalen Williams, quien firmó 40 puntos, y otra noche estelar del MVP Shai Gilgeous-Alexander con 31 unidades y 10 asistencias, Oklahoma City venció 120-109 a los Indiana Pacers en el Juego 5 de las Finales de la NBA, colocándose a una sola victoria del ansiado campeonato.
La serie, igualada 2-2 hasta antes de este enfrentamiento, se inclinó en favor del Thunder, que ahora domina 3-2 y podría coronarse el jueves 19 de junio en el Gainbridge Fieldhouse de Indianápolis.
Impulsado por el rugido del Paycom Center, el Thunder comenzó con un ritmo vertiginoso. Desde temprano, Gilgeous-Alexander y Williams impusieron condiciones, con Aaron Wiggins aportando desde el perímetro (4-4 en triples) y Chet Holmgren dominando en defensa con rebotes y bloqueos clave.
El primer cuarto cerró con ventaja de 32-22 para los locales, diferencia que se amplió hasta los 18 puntos en el segundo periodo gracias a la efectividad ofensiva y a la fragilidad defensiva de los Pacers, afectados además por la limitación física de Tyrese Haliburton, visiblemente mermado por una lesión.
Fiel a su estilo combativo, los Pacers no se desmoronaron. TJ McConnell, con un electrizante ingreso desde la banca, lideró la remontada con 13 puntos en siete minutos del tercer cuarto. Pascal Siakam, el más consistente de los visitantes con 28 puntos, mantuvo viva la esperanza y acercó a Indiana a solo dos puntos (95-93) en el arranque del último cuarto.
La estadística no favorecía a Oklahoma: en la historia reciente de las Finales desde 1997, los equipos que desperdician ventajas de 15 puntos tienen un registro negativo. Pero esta vez, el Thunder no cedió.
Con el juego en el alambre, SGA respondió como lo hacen los grandes. Un par de penetraciones suyas, más un triple oportuno de Wiggins, reconstruyeron la ventaja local. Y entonces volvió a aparecer Jalen Williams, imparable en la pintura y certero desde media distancia. Sumó 13 puntos solo en el tercer periodo y cerró el partido con una línea brillante: 40 puntos en 14 de 24 tiros de campo.
Indiana volvió a acercarse a cuatro unidades gracias a un furioso arranque de Siakam en el cuarto periodo, pero errores puntuales —como una pérdida de Andrew Nembhard— y la falta de presencia interior les impidieron completar la remontada. El Thunder aprovechó los espacios y, con sangre fría, cerró el partido.
Con la victoria, Oklahoma City se encuentra a una sola victoria de conquistar su primer campeonato de la NBA. La historia también les sonríe: los equipos que ganan el Juego 5 en Finales empatadas 2-2 han terminado levantando el trofeo en el 82% de las ocasiones.
“Fue una gran noche, pero sabemos que esto aún no está terminado”, declaró Gilgeous-Alexander tras el partido. “Tenemos que salir con la misma energía en Indiana y terminar el trabajo”.
El Juego 6 se disputará este jueves, y será una oportunidad dorada para que el joven y talentoso equipo de Mark Daigneault selle una campaña de ensueño con el campeonato más codiciado del baloncesto mundial.
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