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foto @okcthunder (X) |
Los Oklahoma City Thunder firmaron una de sus actuaciones más imponentes de la temporada al vapulear a los Cleveland Cavaliers por 134-114, en un partido que estuvo definido desde los primeros minutos y en el que llegaron a tener una ventaja de hasta 42 puntos. Con esta victoria, Oklahoma no solo se vengó de la derrota sufrida ante Cleveland la semana pasada (129-122), sino que reafirmó su estatus como uno de los equipos más dominantes de la NBA.
Desde el primer cuarto, los Thunder impusieron condiciones con un parcial de 32-14, dejando claro que esta vez la historia sería diferente. A pesar de la ausencia de sus pívots titulares, Chet Holmgren e Isaiah Hartenstein, Oklahoma demostró una intensidad defensiva asfixiante y una eficacia ofensiva letal. La ventaja aumentó a 26 puntos en el segundo cuarto y alcanzó su máximo de +42 en el tercer periodo, dejando sin respuesta a unos Cavaliers completamente superados.
La gran figura del partido fue Shai Gilgeous-Alexander, quien firmó una actuación magistral con 40 puntos (17 de 26 en tiros de campo) y 8 asistencias en apenas 29 minutos. Su dominio fue tan absoluto que ni siquiera tuvo que disputar el último cuarto. A su lado, Luguentz Dort aportó 22 puntos con un impresionante 6 de 9 en triples, mientras que Jalen Williams contribuyó con 19 unidades, 6 rebotes, 5 asistencias y 3 robos.
Si el ataque de los Thunder fue espectacular, su defensa no se quedó atrás. Oklahoma dejó en evidencia al que hasta ese momento era el mejor ataque de la liga, obligando a Cleveland a cometer 21 pérdidas de balón, lo que se tradujo en 30 puntos al contraataque. Donovan Mitchell tuvo una noche para el olvido con apenas 8 puntos y un pobre 3 de 15 en tiros de campo, mientras que Evan Mobley solo pudo aportar 5 puntos (2 de 7 en tiros). Solo Darius Garland (20 puntos y 9 asistencias) y Jarrett Allen (13 puntos y 7 rebotes) lograron salvar algo de dignidad para los Cavaliers.
Con el partido decidido al descanso (75-49), la segunda mitad sirvió para que Oklahoma administrara su ventaja con tranquilidad. En el último cuarto, ya con los suplentes en la cancha, Cleveland logró maquillar ligeramente el marcador con un parcial de 33-15, pero sin poner en peligro la abrumadora victoria de los Thunder.
Este triunfo no solo reafirma el poderío de los Thunder, líderes de la Conferencia Oeste con un récord de 34-6, sino que también envía un mensaje claro al resto de la liga: Oklahoma es un contendiente serio al título. Con un Shai Gilgeous-Alexander en nivel de MVP, un equipo equilibrado y una defensa sofocante, los Thunder han dejado claro que esta temporada están listos para llegar lejos.
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