![]() |
Imagen CONCACAF |
La Concacaf ha emitido un severo pronunciamiento tras los incidentes ocurridos durante el partido de ida de los cuartos de final de la Nations League entre Honduras y México en el Estadio Francisco Morazán, en San Pedro Sula. Entre los hechos más lamentables, el entrenador de México, Javier Aguirre, sufrió una agresión al ser golpeado en la cabeza con una lata arrojada desde la tribuna, incidente que lo dejó ensangrentado y desató una ola de críticas hacia las medidas de seguridad del recinto.
Tras una exhaustiva investigación, el Comité Disciplinario de Concacaf dictaminó que la Federación Hondureña de Fútbol deberá disputar su próximo partido como local a puerta cerrada, además de pagar una multa económica. La entidad también advirtió que de repetirse actos similares, las sanciones serán más severas.
“Luego de considerar la documentación y evidencia recabada, el Comité Disciplinario ha determinado que la Federación Hondureña no implementó las medidas de seguridad necesarias durante el partido. Por lo tanto, se le sanciona con un partido a puerta cerrada y una multa económica”, señala el comunicado oficial.
Además, Concacaf valoró las declaraciones de la Federación Hondureña en las que se compromete a mejorar la seguridad en los estadios y prevenir futuros comportamientos violentos por parte de los aficionados.
Paralelamente, el Comité Disciplinario de Concacaf ha abierto una investigación sobre la conducta de Javier Aguirre durante el mismo encuentro. Aunque los detalles sobre el caso no se han hecho públicos, se espera que el organismo emita una resolución en los próximos días.
Estos hechos resaltan la importancia de garantizar la seguridad en los estadios y mantener la disciplina tanto en las gradas como en el terreno de juego, elementos esenciales para preservar la integridad del fútbol en la región.
0 comentarios:
Publicar un comentario