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La selección española de fútbol cerró con broche de oro la fase de grupos de la UEFA Nations League al imponerse 3-2 a Suiza en Tenerife, en un partido que, a pesar de complicarse, confirmó su dominio y dejó señales prometedoras de cara a la fase final del torneo.
El conjunto dirigido por Luis de la Fuente mostró una vez más su capacidad de adaptarse a las circunstancias. España lideró su grupo con 16 puntos, más que cualquier otra selección, y evidenció una profundidad de plantilla que permite mantener el nivel competitivo incluso con rotaciones importantes. Jugadores como Marc Casadó, en su primera titularidad, y Bryan Zaragoza, con un gol decisivo en tiempo añadido, brillaron en un duelo que ofreció momentos de alta tensión y emociones hasta el final.
Yéremy Pino abrió el marcador al minuto 32 tras aprovechar un penalti fallido por Pedri, pero Suiza no se resignó y logró empatar con una magnífica jugada individual de Joël Monteiro al 63’. La reacción española no tardó, y Bryan Gil devolvió la ventaja al 68’, aunque un penalti transformado por Andi Zeqiri al 85’ igualó nuevamente el marcador. Cuando parecía que el partido terminaría en empate, Bryan Zaragoza provocó y ejecutó un penalti en el tiempo añadido para sellar el triunfo.
Con este resultado, España reafirma su condición de favorita y se alista para los cuartos de final en marzo, con el objetivo de mantener el nivel que la llevó a conquistar la Eurocopa. El equipo sigue ilusionando con su plan de juego definido y la irrupción de jóvenes talentos que prometen un futuro brillante.
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