¡Las viejas argüenderas tienen la razón!




“¡Las viejas argüenderas tienen la razón!”
Escrito por el Gordo Cebollas.

Primero que nada tengo que decir que los hombres y las mujeres no somos iguales.
Por ejemplo yo tengo bigotes…y mi mujer… bueno también. Es un mal ejemplo. 

Lo que quiero decir es que aparte de lo notorio en el físico de ambos sexos, todas las demás diferencias han sido creadas por la sociedad. 

Si Usted me dice que la mujer es frágil, delicada, tontita, dependiente, y sumisa; es que no conoce a la Ruperta. Yo no tengo ningún empacho en decir que mi mujer es la que lleva los pantalones en la casa. Ella puede hacer cinco cosas a la vez y no enredarse; y si yo hago dos cosas, no termino ninguna, y además las hago mal.

Recuerdo cuando éramos novios un día fui hacer el super para cenar en mi departamento, ella se ofreció a cocinar y me pareció buena idea. 
Cuando llegué de hacer las compras, traía: vino, cervezas, chips, jamón, galletas, quesos, pan, sodas. Cuando terminé de sacar las cosas de la última bolsa me dijo… 
-¿Y se puede saber qué vamos a comer? 

Yo me quedé mirando la mesa llena de cosas y no entendí la pregunta.
La siguiente semana me invitó a cenar en su casa y ella hizo las compras: tomates, lechugas, limones, aguacates, chiles de todos los colores, pechugas de pollo, tortillas de maíz, cebollas morada, crema, calabacitas, papas… Juro que no sabía que existían tantas verduras, la mesa parecía un jardín de tanto verde.

Todavía no tengo idea como lo hace, pero ella puede convertir toda esa porquería en una deliciosa cena, y con lo que sobra, hace enchiladas para el desayuno…parece brujería. Yo ese día decidí casarme con esa bruja. 

Yo veo como golpean al Zapatos y me da pena como lo maltrata la chaparra. Pero ese también es un mal ejemplo, porque se merece cada madriza que le dan.

Yo se que mis amigos me van a dejar de hablar cuando lean esto, pero después de todos estos años he descubierto que las viejas son más inteligentes, astutas, decididas, fuertes y cabronas que nosotros. 
Ellas son las que deciden siempre, y nos hacen creer que nosotros somos los que tomamos las decisiones. 

Y cuando se enojan, nos ignoran… y allí vamos de rogones… ¿o no?.

Yo vivo hace muchos años en gringolandia (Huntintong Park esquina con Disneylandia) y aquí las viejas son canijas, por eso me sorprendí cuando esta mañana escuche las noticias en ESPN y me enteré que se habían juntado las chavas de la selección de fútbol y habían presentado una demanda federal en contra de la Federación Americana de Fútbol… 
-Viejas arguenderas -pensé yo. 

Pero después de ver las cifras que aparecían en la pantalla, me sorprendieron:
Las mujeres americanas han ganado tres copas del mundo, y cuatro veces la medalla de oro olímpica, entre otras muchas competiciones alrededor del mundo. La selección masculina, no ha ganado nada, cero, zip, nothing… ahora escuchen estas cifras: si la selección juega un amistoso cada jugador gana: 17,625 dólares. 
Las mujeres por un amistoso: 1,350 dólares. 
Menos del el 10 por ciento de lo que ganan los varones. 

La selección gana la copa del mundo, los hombres tiene un bono de 400,000 (y nunca han ganado); las mujeres reciben un bono de 75,000. 
Más de seis veces menos.

Pero el problema no sólo está aquí se extiende a nivel mundial gracias a nuestra sensible y corrupta organización que rige el destino del fútbol mundial. La FIFA le entregó a Alemania 35 millones de dólares como bono, aparte de los salarios por juego y los bonos por pasar la diversas rondas de la competencia. 
La selección Americana de damas le entregaron 2 millones de dólares. 
Un poco más del cinco por ciento de lo que ganan los varones.

¿Por qué esa enorme desigualdad?
Se calcula que la FIFA ganó alrededor de 4.8 billones… otra vez despacio: cuatro mil millones de dólares solo por la copa de Brasil que acaba de pasar. 

¿No puede haber una forma donde esas ganancias se repartan equitativamente entre hombres y mujeres?. ¿Es qué las mujeres no son parte importante de la federación internacional? ¿O tal vez se necesita que las mujeres se unan y formen su propia organización con sede en New York?

En nuestra última discusión con mi cuate el Zapatos me dijo:
-El fútbol es de hombres… ¿quién quiere ver un juego de viejas? Puedes hablar de los derechos de las mujeres pero los raitings los dan los varones… ¿Dime quién de las viejas se puede comparar con Messi o Cristiano Ronaldo…?

La selección femenina atrae más público que la masculina en este país.
Yo sólo les recuerdo que la mitad de la población mundial son viejas, y en la mayoría de los casos la decisión de lo que se come o se compra en sus hogares los toman las mujeres. El poder económico que tienen es enorme, pero ellas todavía no lo saben, el día que se den cuenta, van hacer que nosotros nos pongamos tacones y sostenes para ir a trabajar… y allí quiero ver quién se burla de ellas…

El equipo de la selección de Estados Unidos es tres veces campeón del mundo. ¿Escucharon eso? TRES VECES CAMPEÓN DEL MUNDO!!!… y créanme que es tan difícil para ellas, como para los hombres ganar el campeonato. 

El esfuerzo, el trabajo y los sacrificios son iguales. Miento, no son iguales; los hombres viajan en mejores condiciones, se hospedan en hoteles de lujo, los consienten como si fuesen damas. 

¿Y qué pasa con nuestras verdaderas damas? 
Las tratamos como si fuesen una selección de engreídos que no han ganado nada.
¿Justo? 
No, claro que no.

Como hacer para que se pueda equilibrar el asunto, no tengo idea. Pero ya es hora que abogadas, contadoras, mujeres políticas, jugadoras, entrenadoras y aficionadas se unan detrás de esta causa justa: “Para igual trabajo, igual pago”.

Y si las mujeres se topan con políticos y dirigentes o empresarios, que no aceptan el cambio, hablen con su madres, sus hermanas y sus mujeres, y verán como con un poco de presión, todos los hombres doblan las manos.

GC

PD: Otra sugerencia para las mujeres. ¿Se dieron cuenta cuando cayó el presidente de FIFA? No fue por las pruebas de corrupción o por los escándalos de sus dirigentes; Ni por la elección del mundial en medio del desierto. Fue cuando Coca-Cola, Visa y Adidas se dieron cuenta que podían perder billones, si seguían apoyando al viejo cascarrabias. 

Mujeres, dejen de comprar Cocas y Adidas, y no usen sus tarjetas de crédito Visa por un mes y verán como hasta consiguen nombrar la primera mujer presidente de FIFA. Espero que la Ruperta lea esto y me de cenar rico… ¡Arriba las viejas!


0 comentarios:

Publicar un comentario

 

Síguenos en facebook

Síguenos en Twitter

Atletismo Fénix

Atletismo Fénix