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Si alguien tenía dudas sobre el impacto de un solo jugador en la duela, la noche del sábado en el T-Mobile Arena las disipó todas. En un duelo de titanes del Oeste que se sintió más como una final de conferencia que un torneo de mitad de temporada, los San Antonio Spurs dieron el golpe sobre la mesa al derrotar al todopoderoso Oklahoma City Thunder, asegurando su pase a la Gran Final de la NBA Cup.
La noticia no es solo la victoria, sino ante quién y cómo se logró. El Thunder, que llegó a Nevada como el equipo más dominante de la liga y con un récord casi inmaculado (apenas su segunda derrota de la temporada), se topó con un muro francés que regresó justo a tiempo para cambiar la historia.
Victor Wembanyama volvió a la alineación y lo hizo con una voracidad pocas veces vista. Tras perderse acción reciente, su regreso fue el catalizador que Gregg Popovich necesitaba. "Wemby" no solo protegió el aro alterando cada tiro que el Thunder intentaba en la pintura, sino que fluyó en ofensiva con una versatilidad que desquició a la defensa de OKC. Su presencia abrió la cancha y devolvió la confianza a un equipo joven que, por una noche, lució veterano.
El Thunder ha sido la aplanadora de la NBA esta campaña. Verlos perder es una rareza estadística. Sin embargo, la defensa de San Antonio, anclada por el regreso de su estrella, logró lo que parecía imposible: frenar el ritmo vertiginoso de OKC. A pesar de los esfuerzos de sus estrellas habituales, el Thunder no encontró respuesta al esquema defensivo planteado por los texanos en los minutos finales, sufriendo apenas su segundo descalabro en lo que va del año, pero el más doloroso, pues les cuesta la eliminación del torneo.
El escenario para la final de la NBA Cup no podría ser más atractivo. Por un lado, Jalen Brunson y la mística de los Knicks buscando romper una sequía de décadas; por el otro, Victor Wembanyama y los Spurs buscando cimentar el inicio de una nueva dinastía. Es un guiño a las Finales de 1999, pero con el sabor del futuro de la liga.
Las Vegas tendrá el desenlace que el mundo del baloncesto pedía. Los Spurs están de vuelta en un escenario grande, y lo hicieron derribando al gigante del momento.
Foto: Steve Marcus/ Getty Images
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