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foto @realmadrid (X) |
El Real Madrid logró una victoria crucial al imponerse 0-3 al Girona en el Estadio Montilivi, en un encuentro que reafirmó su jerarquía y renovó sus aspiraciones en LaLiga. Con esta goleada, los dirigidos por Carlo Ancelotti se colocan a dos puntos del Barcelona, con la posibilidad de tomar el liderato en su próximo compromiso.
El partido comenzó con un Girona agresivo, decidido a plantarle cara al gigante madrileño. Liderados por un dinámico Bryan Gil y el debutante Yáser Asprilla, los locales generaron peligro en los primeros minutos. Sin embargo, la defensa merengue, comandada por Thibaut Courtois y el orden de Antonio Rüdiger, logró mantener la calma.
La resistencia del Girona se quebró en el minuto 36 cuando Jude Bellingham, fiel a su reputación de resolutivo, ejecutó un disparo potente que cruzó la portería de Gazzaniga, estableciendo el 0-1. Este gol desmoronó la moral local y marcó el inicio del dominio blanco.
En la segunda mitad, el Real Madrid amplió su ventaja con una exhibición de contundencia. Arda Güler, el joven talento turco, aprovechó un pase entre líneas de Bellingham y definió con frialdad para el 0-2 en el minuto 55. Apenas siete minutos después, Kylian Mbappé se redimió de una actuación discreta con un gol tras un potente disparo cruzado.
El Girona, a pesar de su esfuerzo, no encontró vías para descontar. Courtois fue clave al desviar un peligroso remate de Asprilla, asegurando que el arco merengue se mantuviera intacto.
Con este triunfo, el Real Madrid envía un mensaje directo al Barcelona: la lucha por el título sigue abierta. Mientras el Girona pierde terreno en la tabla, los blancos avanzan con paso firme hacia el liderato, demostrando que su calidad y profundidad de plantilla son determinantes en los momentos cruciales.
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