Ronaldo "Lazy Boy" Rodríguez se llevó la victoria en UFC 306 tras una emocionante pelea contra Ode’ Osbourne.

foto @lazyboy.ufc

 

Ronaldo "Lazy Boy" Rodríguez prometió un espectáculo y cumplió en UFC 306, llevándose una victoria vibrante frente a Ode’ Osbourne en la categoría de peso mosca. A pesar de un difícil primer asalto en el que estuvo a punto de ser noqueado, el peleador chiapaneco demostró su resiliencia, sobreviviendo a un golpe letal y regresando con fuerza en los siguientes rounds.

El segundo asalto marcó un cambio en la pelea, donde Rodríguez impuso su dominio en el suelo, buscando someter a su rival con una guillotina que no pudo concretar, pero dejando clara su superioridad. Con el apoyo de los gritos de "¡México, México!" que resonaban en La Esfera de Las Vegas, el mexicano encontró la energía necesaria para presionar a Osbourne en el tercer y último asalto.

Aunque el jamaiquino intentó un derribo salvador, Rodríguez supo recuperarse, dar vuelta la situación y finalizar el combate con un control claro sobre su oponente. Las tarjetas favorecieron al mexicano con puntuaciones de 29-28 y 29-27, llevándose una victoria celebrada por la afición, aunque no exenta de polémica.

El carismático peleador no solo conquistó a los jueces, sino también al público, quienes lo aclamaron al término de la pelea mientras levantaba el puño en señal de triunfo, exclamando “¡Viva México!”. Esta actuación heroica dejó claro que "Lazy Boy" Rodríguez sigue escalando posiciones en UFC, con un futuro brillante que apunta al título de campeón.

Tras la contienda, Rodríguez fue trasladado a un hospital para ser evaluado debido a los golpes recibidos, en especial el que lo dejó maltrecho en el primer round. Sin embargo, este es un procedimiento rutinario para proteger la integridad de los peleadores, lo que no disminuye el logro del mexicano, quien suma una victoria más a su historial, ahora con un récord de 17-2.

Rodríguez, cuya vida ha estado marcada por desafíos, volvió a demostrar que está dispuesto a luchar hasta el final, dentro y fuera del octágono, consolidándose como una de las promesas más emocionantes en la UFC.