La Pandilla Escarlata se proclamaron campeones de la Liga Mexicana de Béisbol 2024 al barrer a los Sultanes de Monterrey en la Serie del Rey.

foto @DiablosRojosMX (X)

 

Los Diablos Rojos del México lograron una hazaña histórica al coronarse campeones de la Liga Mexicana de Béisbol 2024, tras barrer a los Sultanes de Monterrey en la Serie del Rey. La victoria definitiva por 4-2 en el cuarto juego, celebrado en el Estadio Mobil Super, confirmó el dominio total de los capitalinos, quienes lograron su 17° campeonato en la historia de la liga, rompiendo una sequía de 10 años.

Desde la primera entrada, los Diablos demostraron su poderío. Un cuadrangular de José Marmolejos, que remolcó a Franklin Barreto y Robinson Canó, puso el marcador 3-0, adelantando lo que sería un triunfo cómodo para los visitantes. Juan Carlos Gamboa y Julián Ornelas ampliaron la ventaja con un hit que llevó a Gamboa a anotar la cuarta carrera, sentenciando virtualmente el encuentro desde temprano.

El picheo de Brooks Hall fue magistral. El abridor lanzó siete entradas impecables, permitiendo solo dos imparables y ponchando a siete rivales. Aunque los Sultanes intentaron reaccionar en la novena entrada con anotaciones de Ramiro Peña y Jermaine Palacios, el cierre vino con un elevado a la segunda base que atrapó Canó, sellando el campeonato.

Con esta barrida, los Diablos culminan una temporada extraordinaria en la que jugadores de renombre como Robinson Canó y Trevor Bauer fueron piezas clave en la consecución de la Copa Zaachila. Además, el equipo mantuvo su hegemonía no solo en casa, con abultadas victorias de 14-6 y 17-0 en los primeros juegos de la serie, sino también como visitantes, dejando sin respuesta a los regiomontanos.

La afición de Monterrey, resignada, vio cómo los Diablos consolidaban su supremacía. El equipo de la Ciudad de México dominó tanto a la ofensiva como en el montículo, especialmente en el tercer juego, donde mantuvieron a los Sultanes sin anotar por 29 entradas consecutivas, una muestra de su total control.

Este título, además de romper una década sin campeonatos, reafirma a los Diablos Rojos del México como el equipo más dominante de la LMB, culminando un año redondo y sellando su legado en la historia del béisbol mexicano.

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