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Foto: @rolandgarros (X) |
Jasmine Paolini ha extendido la ilusión italiana en Roland Garros, alcanzando su primera final de Grand Slam tras vencer contundentemente a la rusa Mirra Andreeva, de solo 17 años, con un marcador de 6-3 y 6-1. Ahora, la número 12 del mundo se prepara para enfrentar a la polaca Iga Swiatek, actual número uno y campeona de las dos últimas ediciones del torneo.
“Soñar es lo más importante en la vida”, declaró Paolini emocionada en la pista central de París, momentos después de haber conseguido el mayor logro de su carrera. A sus 28 años, Paolini necesitó apenas 1 hora y 13 minutos para superar a la joven promesa rusa, quien nunca encontró su ritmo ante la solidez de la italiana.
Esta hazaña representa un hito tardío para Paolini, oriunda de la Toscana, quien hasta este año no había logrado encadenar dos victorias consecutivas en un Grand Slam.
Paolini, que había llegado a los octavos de final en el Abierto de Australia a principios de este año, confirmó su progreso al ganar su primer torneo WTA 1000 en Dubái, un escalón por debajo de los Grand Slam. Ahora, en Roland Garros, ha superado todas las expectativas, incluida una sorprendente victoria en cuartos de final contra la kazaja Elena Rybakina, número cuatro del mundo.
Para Paolini, este Roland Garros está siendo un verdadero cuento de hadas. Nunca antes había pasado de la segunda ronda en este torneo, y ahora se encuentra a un paso de hacer historia. En la final del sábado, buscará convertirse en la segunda italiana en ganar el título femenino de Roland Garros, siguiendo los pasos de Francesca Schiavone, campeona en 2010.
Swiatek, con su dominio absoluto en Roland Garros, será la gran favorita en la final. Sin embargo, Paolini llega con la confianza en su mejor momento y con la determinación de culminar su viaje de ensueño con un final feliz. La italiana ha mostrado que puede competir al más alto nivel, y el duelo del sábado promete ser un enfrentamiento electrizante.
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