Por fin voy a poder ver el mundial sin sufrir.
México está afuera después de un partido mediocre y donde gracias a Memo Ochoa no nos metieron una goliza.
Soy mexicano y por supuesto sueño que la selección gane algún día el mundial; pero siendo objetivo, no veo para cuando.
Siento decirlo pero con la selección tengo la costumbre de esperar peor, y sufro sobresaltos cuando hay resultados positivos. Cuando eso sucede trato de controlar mi emociones, y me convenzo que el próximo juego nos van a dar una paliza y volver a la normalidad de los perdedores.
Eso lo hago para evitar un golpe emocional mayor.
Es una manera de protegerme de la decepción nacional.
Cada mundial desde que tengo uso de razón, nos angustia, llega con apuros, nos prometen grandezas y cuando caemos en sus engaños, soñamos por un par de semanas, terminamos por darnos en la madre contra una pared, y ver nuestra realidad.
Los mexicanos parece no queremos ver esa realidad, la tratamos de evadir a toda costa; cambiamos de tema en las platicas; nos hacemos como que no existe; y cuando alguien de fuera llega y pretende hacernos notar lo que tenemos en nuestras narices, le decimos:
-“Es que tu no entiendes, porque no eres mexicano”.
Y si insiste, le ponemos una madriza por entrometido.
Otra cosa que es dolorosa fue ver a Osorio después del juego.
El tipo es una buena persona (hasta lo chamaquearon con el sueldo y no se quejó).
Los honestos es algo que no reconocemos en México, por que son una especie en extinción. Ya verán como regresamos a lo conocido: un entrenador brabucón, tranza, mafioso, acostumbrado a perder, y que tenga buena relación con los federativos. El Piojo era un buen bicho para ilustrar a lo que me refiero.
Y si usted se pregunta ¿Cuándo vamos a cambiar?
La respuesta es nunca. O Como diría mi abuela: “A la muerte de un Obispo”… o “Cuando López Obrador llegue a la presidencia”…
¡A Chingaos!
Estaba soñando o ese güey es el nuevo presiente electo.
Ya chequé en el internet, y si no pasa nada raro entre hoy y el jueves, parece ser que el Señor Don Peje es nuestro nuevo preciso.
Aprovechando esta columna les mando a las nuevas autoridades unas ideas:
Que el primer acto del nuevo gobierno sea nacionalizar la Selección Mexicana.
Y Usted se preguntará ¿Qué no son mexicanos los de la Femexfut?
Sospecho que son hijos de la FIFA, o sea son suizos… los Jijos de la fregada.
Otras ideas:
1. Todos los equipos de primera división deberán tener el 95% de sus jugadores mexicanos de nacimiento.
2. Que todos los estadios cobren los boletos, no más caros del 10% del sueldo mínimo diario. Y los menores de edad entran gratis.
3. El fútbol es un derecho de todos los mexicanos. No más fútbol por cable o pago por evento.
4. Todos los propietarios, entrenadores, directores deportivos que tengan antecedentes penales o no paguen impuestos quedan descalificados de por vida.
5. La camiseta de la selección deberá ser diseñada y producida por una empresa mexicana, que tendrá la obligación de poner los precios al alcance de todos los mexicanos.
6. Se otorgará presupuesto para que todos los jugadores de selecciones nacionales, desde menores hasta la mayor, tengan un salario decente. Además de un seguro médico de por vida por los servicios prestados.
7. Prohibir a Televisa o Azteca que meta las manos en la selección. Y si no hacen que el gobierno, meta las manos en sus empresas.
8. Los jugadores que no sean disciplinados, sean conflictivos, o jueguen sin ganas, tendrán que presentarse en el cuartel militar más cercano a su concentración, para un reentrenamiento obligatorio, determinado por el tamaño de su falta.
Haber si con esto no sudan la camiseta los cabrones...
Bueno, me voy triste al bar del aeropuerto a esperar mi vuelo de regreso a Moscú…
El Demoño
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