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| Foto: ATPWorldTour twitter |
Pocas veces se ha visto una superioridad como la que ha demostrado Novak Djokovic en el día de hoy. Sin alardes, sin artificios y haciéndolo fácil. Nole ha impuesto hoy ese autoritarismo absolutista que ha mostrado en esta última década en nuestro tenis, jugando a un nivel espectacular y dejando claro que quiere darlo todo para volver a los puestos de arriba de la tabla clasificatoria cuanto antes. Tras un inicio gris en pista dura, Djokovic espera con ansias mejorar sus prestaciones sobre la tierra batida. Hoy en su debut en Montecarlo, el jugador serbio se deshizo por un contundente 6-0 y 6-1 del serbio Dusan Lajovic en 56 minutos de juego.
Sin embargo, el ex número uno del mundo comenzó el encuentro de manera intratable, practicando un tenis estratosférico y convirtiéndose en un vendaval ante el que nada pudo hacer Dusan Lajovic. El primer juego, ganado en blanco por Novak Djokovic con un excelente servicio, un saque directo y una buena derecha fue el más claro ejemplo del nivel del balcánico en este inicio de partido. La velocidad y la profundidad de los golpes, sumados a la solidez desde el fondo de la pista fueron un obstáculo insuperable para su rival, que cedió su primer juego al saque y se vio con un 3-0 en contra después de que Djokovic consolidase el break, consiguiendo 12 de los 16 puntos que se habían jugado hasta el momento en el partido.
El nivel tenístico entre ambos jugadores eran tan grande, que Djokovic continuó jugando a un tenis impecable que sacaba de quicio a su rival. Sonrojante nivel el ofrecido por el actual número 93 del ránking ATP, que ha llevado a cabo una auténtica ofensa al público asistente a la pista central de Montecarlo. Nole siguió sumando juegos con su servicio y, con ello, minando la moral de un Dusan Lajovic que comenzó a mostrarse impotente sobre la pista, cometiendo numerosos errores no forzados que terminaron provocando el segundo y tercer break, que establecía un contundente 6-0 en el marcador en algo menos de veinticinco minutos de partido.
Parecía prácticamente imposible encontrar una palabra para calificar el nivel tenístico de Djokovic, que estaba arrollando a su rival en su debut en el Masters 1000 de Montecarlo. También era imposible mantener ese juego durante el segundo set, pero el balcánico demostró una vez más el por qué quiere volver a ese nivel que demostró hace un par de años en el circuito, donde era el máximo dominador. Lajovic se apuntó su primer juego con su servicio, pero sólo fue un oasis en el desierto gobernado por Novak Djokovic, que rápidamente comenzó a coger su arsenal tenístico y comenzó a conseguir puntos uno detrás de otro.
Si a Djokovic en el día de ayer le preguntas como sería su debut soñado en Montecarlo hubiera apostado por este, y es que en 56 minutos de juego había conseguido el acceso a segunda ronda, donde se medirá al croata Borna Coric. Sin duda primera prueba de fuego para el jugador balcánica que recordemos no tuvo un sorteo demasiado favorable, pero jugando al nivel mostrado hoy nada es imposible en el tenis.
Fuente: Punto de break
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