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| Foto: somosbasket.com |
Parece que Andre Iguodala sabe muy bien cómo ganar en una negociación, aunque sea con el equipo campeón que está llamado a gastarse mucho dinero en impuestos de lujo si quieren alargar su dinastía. Por eso el sexto hombre de los Warriors ha conseguido que los californianos le den 48 millones de dólares por pasar los próximos tres años en su equipo, y no en los Houston Rockets, que tras el fichaje de Chris Paul se posicionan como la alternativa más realista a cuestionar su dominio en la NBA.
Iggy no tenía pensado reunirse con los Warriors hasta este sábado a última hora, y todo parecía indicar que cuando canceló todas las reuniones que le quedaban después de verse con directivos de la franquicia texana el trato ya estaba hecho, pero da la sensación de que tenía la situación bastante controlada y sabía que el pánico de Golden State les haría hacer un esfuerzo económico extraordinario, porque también sabía que su marcha a Houston sería un problema para ellos, no tanto como si se hubiera marchado a un equipo con menos potencial.
El nuevo contrato está garantizado al cien por cien y no tiene ninguna opción ni de equipo ni de jugador, por lo que el MVP de las Finales de 2015 se asegura 48 millones de dólares en los próximos tres años.
Iguodala también se había reunido con los San Antonio Spurs, y tenía pendientes encuentros con otros equipos como los Philadelphia 76ers.
Tras la renovación de Shaun Livinston (24 millones en tres años) y el contrato de 201 millones de Stephen Curry, con la renovación de Kevin Durant todavía pendiente, Iguodala parecía un candidato muy sólido a abandonar el barco llegados a este punto, ya que los Warriors no podrían ofrecerle mucho dinero si querían tener un pequeño margen para seguir fichando jugadores.
Kevin Durant tendrá que renunciar a más dinero del que esperaba para que el bloque de estrellas de Golden State pueda seguir compitiendo cada año por el anillo de campeón.
Fuente: Blog de basket
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