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Foto: ATPWorldTour twitter |
Rafael Nadal voló hacia los cuartos de final de Acapulco tras destrozar a Paolo Lorenzi por 6-1 y 6-2 después de sólo 55 minutos de encuentro. El español volvió a rayar a un nivel muy alto y sólo existió él sobre la central del Abierto Mexicano hoy.
Apareció de nuevo Nadal con el vendaje en su rodilla derecha aunque por cómo se empezó a mover nada más empezar el partido, no pareció evidenciar ningún tipo de problema. Rafa sale enchufado desde el primer momento y siempre mostró una marcha más que el italiano en este primer set que apenas sobrepasó la media hora de duración.
El mallorquín continuó la línea de juego que sigue desde que Carlos Moyà se sentara a su lado del banquillo. Montado sobre la línea de fondo, dictaba los puntos a base de golpes profundos y buscando siempre su drive como arma de ataque a la que tenía la más mínima ocasión. Lorenzi se defendía como podía corriendo varios metros por detrás de la línea, pero poco podía hacer ante tan vendaval de golpes que le llegaba desde el otro lado de la red.
Se nota el trabajo específico en su tren inferior. No se le recuerda tan rápido de piernas en años. Su velocidad de pies le permite llegar siempre a tiempo a las pelotas, pudiendo golpear bien para luego, poder rematar el punto. Una forma inteligente de no tener que correr de más. El italiano intentó acercarse a la red, buscando la manera de recolectar algún punto pero ni por esas. Este es un Nadal evolucionando hacia una versión muy ofensiva de sí mismo, junto a un nivel muy alto físicamente, lo que le hace inexorablemente optar a lo que él quiera.
En cuartos, Rafa se enfrentará a Yoshihito Nishioka, número 86 del mundo contra el que nunca se ha enfrentado antes. El japonés se deshizo tres sets del australiano Jordan Thompson.
Fuente: Punto Break
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