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| foto AP |
El fútbol femenino vivió una noche histórica en el St. Jakob-Park de Basilea, donde Inglaterra se coronó bicampeona de Europa tras derrotar 3-1 en los penaltis a una España que dominó gran parte del partido pero sucumbió en la crueldad de la lotería desde los once metros. Un duelo de titanes que mantuvo en vilo a los 38,000 espectadores hasta el último instante, consolidando el crecimiento exponencial de este deporte con una final de altísimo nivel técnico y emocional.
La Roja salió con hambre de gloria, buscando completar el triplete continental tras su título mundial en 2023. Aunque Inglaterra generó el primer aviso a los 3' (remate de Russo salvado por Cata Coll), pronto el equipo de Montse Tomé tomó las riendas. La conexión entre Athenea -sorpresa en el once inicial- y Ona Batlle dio frutos al 25': centro preciso de la lateral y cabezazo impecable de Mariona Caldentey para adelantar a España (0-1).
Tras el gol, España dominó con un 63% de posesión, pero no logró ampliar la ventaja por las atajadas de Hannah Hampton (espectacular ante Pina al 72'). El partido giró al 57' con la entrada de Chloe Kelly, heroína inglesa en la Euro 2022: centro milimétrico de la suplente y cabezazo de Alessia Russo para el empate (1-1). La delantera del Arsenal, con solo un gol previo en el torneo, eligió el momento perfecto para despertar.
En los 30 minutos extras, España asedió con 8 remates (3 de Salma Paralluelo), pero la solidez defensiva inglesa y otro milagro de Hampton lo impidieron. La tanda de penaltis deparó momentos dramáticos:
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