Daria Kasatkina se salva de tres puntos para partido y derrota a Muguruza

Foto: WTA twitter

Es una de las candidatas a poder liderar el tenis mundial en el presente y en un futuro no muy lejano. Tiene casi todo para poder hacerlo; una gran altura que le otorga cierta ventaja, y también desventaja, y unos golpes verdaderamente potentes que hacen de Garbiñe Muguruza una jugadora muy temible para las rivales. Pero en el tenis, no todo es pegarle fuerte a la bola, el aspecto mental adquiere una importancia extrema, y en este factor, la española tiene muchas cosas que mejorar. Hoy, en su partido de semifinales en el WTA Premier de Dubái, Muguruza desaprovechó tres bolas de partido en el segundo set, para finalmente acabar perdiendo ante Daria Kasatkina.

Fiel a su estilo y sin dejarse intimidar por una consumada pistolera como es Daria Kasatkina. Así juegó Muguruza, asumiendo el rol de dominadora y buscando llevar la iniciativa en todo momento sin precipitarse. La soviética confunde en muchas ocasiones la agresividad con ser una escopeta de ferias, y se desordena de piernas y cuerpo buscando golpes ganadores en cualquier situación. Garbiñe para nada se desesperó en los compases iniciales, cuando las cosas le salieron bien a Kasatkina, consciente de que si hacía su trabajo y tiraba con profundidad, los errores de la rusa llegarían.

Y llegaron, como así demuestra el hecho de que la nacida en Caracas encadenara tres juegos de manera consecutiva, abriendo brecha en el marcador y jugando a un grandísimo nivel. Kasatkina se atrapó con el servicio, cometiendo alguna que otra doble falta y cosechando pobres porcentajes con su primer servicio. Garbiñe por su parte, fue mejorando poco a poco con el paso de los minutos, a partir de su intensidad al resto y fortaleza mental y acabó con más golpes ganadores que errores no forzados. Parcial de 6-3 y primer set en el bote para la cabeza de serie número dos.

Lejos de venirse abajo, el carácter competitivo de Kasatkina salió a relucir para mantener la igualdad en el segundo parcial, pues Muguruza había crecido a partir del triunfo en la primera manga. La equidad protagonizó los primeros cuatro juegos del set, pero la jugadora española se encargó de romperla con una derecha a la línea e fondo que le dio la primera rotura y estableció el 4-3 en el electrónico. Sin embargo, la rusa le devolvió el break en el siguiente juego y comenzó a creer en la remontada tras volver a tomar la iniciativa en el marcador con su servicio.

De nuevo se encontró contra las cuerdas Kasatkina al ver que Garbiñe volvía a estar break arriba en el tercer set con 5-6, pero el empuje y el coraje de la jugadora rusa volvió a equilibrar el encuentro y llevar la segunda manga al desempate... ¡Y menudo desempate! Ambas jugadoras jugaron a un nivel de tenis espectacular, consiguiendo salvar bolas de set y de partidos, y llevando el partido a una emoción típica de una final de Grand Slam. Finalmente, y con un parcial de 13-11, Daria Kasatkina se llevaba el segundo set y forzaba al partido a una tercera y definitiva manga.

El tercer set no pudo comenzar peor para los intereses de la hispano-venezolana. En el juego inicial, su rival le rompió el saque y se vio obligada a tener que ir a remolque durante todo el set, sufriendo en casi todos sus juegos al servicio, prueba del tremendo cansancio que tenía la número tres del mundo. Kasatkina se mostraba cada vez más solida en la pista y no dejaba en ningún momento que Garbiñe pudiera volver a meterse en el partido, es más, volvió a romperle el servicio para ponerse 5-1 arriba, resultado que ya dejaba prácticamente sentenciado el partido.

Finalmente, Daria Kasatkina consiguió llevarse el set por un contundente e inapelable 6-1, para clasificarse a una nueva final. Su rival mañana saldrá del duelo de la segunda semifinal que enfrentará a la ucraniana Elina Svitolina y la alemana Angelique Kerber.

Fuente: Punto de break