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Foto. ligamx.net |
Con polémica y en un apretado partido, Tigres sacó ventaja en la ida de las Semifinales frente al América con un 0-1 que se definió por un penal que no era, aunque los felinos fueron superiores casi todo el partido, por lo que el resultado final deja un poco de justicia para un equipo azulcrema que sigue sin reencontrarse con el gol.
Apenas en los primeros minutos, Gignac se plantó en el área para fusilar a Marchesín, pero el guardameta le ganó el duelo con una gran reacción. Vargas tuvo la segunda clara de los felinos en otro remate que el guardameta argentino sacó apenas con los dedos. América apenas pudo reaccionar con un cabezazo de Aguilar.
Pese a que el trámite del partido se equilibró pasada la primera media hora de partido, el duelo en el Estadio Azteca seguía perteneciéndole a Tigres, que no lograba concretar sus jugadas de peligro. En la recta final del primer tiempo, Gignac estuvo cerca de definir el primero, pero su disparo desde la media luna alcanzó a ser desviado.
En el arranque del segundo tiempo llegó la polémica por un penal que no era, luego de que el silbante determinara que Bruno Valdez había detenido la pelota con la mano, cuando en realidad lo había golpeado en la cara. Desde los once pasos, Juninho definió el primer gol de la noche al 49’, generando un cierre dramático.
Poco a poco, las Águilas fueron avanzando en la cancha, hasta que lograron arrinconar a Tigres en su área, buscando desesperadamente el gol de empate. Sin embargo, en contragolpe quedaban expuestos, por lo que Marchesín se tuvo que exigir una vez más ante un remate de Hugo Ayala que llevaba dirección de gol.
Los centros y los pases nunca encontraban un rematador en América, lo cual generaba además contragolpes que afortunadamente no aprovechaba Tigres. A cinco del final, Mateus Uribe dejó una gran postal con una chilena que mandó el balón apenas por un lado, en la última clara que pudo tener el cuadro azulcrema.
Ahora América viajará a Monterrey con la obligación de hacer dos goles, dándose el lujo incluso de recibir uno, ya que necesita ganar por el marcador que sea, siempre y cuando haga dos o más goles. Tigres, que perdonó en varias ocasiones, también deberá trabajar en la contundencia para evitar un desenlace inesperado en el Volcán.
Fuente: Fútbol Pasión
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