Chivas y Santos reparten puntos

Foto: Chivas twitter

Santos se metió al infierno rojiblanco y cuando parecía que se llevaría la victoria, un certero cabezazo de Rodolfo Pizarro salvó la tarde al marcar el 1-1 final. Guadalajara sigue sufriendo y pagando caro sus errores en la zona baja, esta vez el villano fue Rodolfo Cota. Los demonios rojiblancos merodean a un Matías Almeyda temeroso y erróneo en sus cambios, esta noche no dormirá bien. 

El infierno se encendió. El santo arrancó cauto; Chivas fue un demonio. A velocidad y por los costados, el rebaño buscó golpear primero y casi lo logró en las botas de Orbelín Pineda, su mejor hombre y su mejor cañón. Salvaron Jonathan Orozco y un Néstor Araujo en su mejor tarde. La muralla albiverde. 

Superado el cuarto de hora, el juego se abrió y fue de meta a meta. Santos despertó en el infierno y pudo hacer mucho daño en la portería de Rodolfo Cota, pero Furch falló en dos ocasiones con la cabeza y perdonó. 

Al 41’, previo al descanso, volvió a despertar el demonio, lo detuvo todo Jonathan Orozco. Primero probó suerte Orbelín Pineda, quien se sacó a dos, enfiló al área chica y disparó, a mano cambiada y por bajo salvó el ex Monterrey; en el rebote disparó Rodolfo Pizarro y por aire atajó Orozco a dos manos. El tercer intento fue a dar al travesaño y ahí terminó el susto. La suerte juega y esta tarde lo hace para la visita. 

Para el complemento el dueño de la pelota fue Santos, fue quien propuso y puso peligro. Logró igualarle el juego a Guadalajara y superarlo en medio campo. Chivas dejó ir un primer tiempo en el que debió marcar por lo menos un gol. 

Al 58’, en cobro de córner, Santos silenció el infierno, lo apagó de apoco. La jugada fue de acierto y error. El acierto estuvo en el centro de “Osvaldilto” Martínez y en el perfecto testarazo de Julio Furch, que a primer palo conectó y marcó su primero del torneo. El error fue de Rodolfo Cota, quien se quedó a cortó en la salida y nada pudo hacer ante el certero remate del argentino.

Santos puso en calma el juego y tras el gol replegó sus líneas. Desesperó tanto a Chivas, que la oncena de Matías Almeyda se acabó el reloj en faltas e intentos de ataque poco peligrosos. El juego se calentó por la expulsión y el “show” del “Chepo de la Torre. 

La visita le puso tanta calma al juego, que se entregó a un Guadalajara que supo como revivir su infierno a un minuto del final. Al 93’, en una jugada toda de Isaac Brizuela, Jair Pereira se fue al ataque, remató a puerta y la estampó en el travesaño; en el rebote, Pizarro conectó con la cabeza y marcó la igualdad. Chivas, con lo justo, evitó que las llamas del infierno lo quemaran. Respira Matías Almeyda. 

Fuente: Fútbol Pasión