Los rojinegros del Atlas vencen al campeón

Foto: Ligamx.net

La noche de este sábado en el Estadio Jalisco los Rojinegros del Atlas sorprendieron al campeón del fútbol mexicano, Tigres, y lo vencieron. Un autogol de Hugo Ayala y otro gol de Matías Alustiza sentenciaron el partido 2-0 a favor del conjunto atlista. 

Atlas juega con tanto miedo, que incluso cuando el rival no amedrenta y más bien lo deja ser, no sabe qué hacer. Es la costumbre de saberse superado lo que le impide ser mejor equipo. Gignac asusta, pero no tanto. No por ahora. 

Esta noche el zorro arrancó el juego tibio y timorato, pero terminó siendo amo y señor de la pelota. Se fue despojando del miedo cuando descubrió que las estrellas en las camisetas no juegan partidos, mucho menos los ganan. Descubrió además que sí podía ganarle, marcarle y jugarle de tú a tú al cuadro “A” de Tigres que sigue dormido, de vacaciones, festejando en el Universitario el campeonato. 

Tras el vendaval emocional que significó un Estadio Jalisco casi lleno para recibir al campeón en casa, las piernas se le soltaron a Garnica y Reyes, que fueron todo y no dejaron ser nada a Damián y Damn respectivamente. Sumemos a un Alustiza que pronto será el mejor futbolista de Atlas y que cuando Márquez quiere es un genio, ese del Barcelona. Hasta aquí, todo en orden. 

Al juego no le pasó mucho, no hasta el minuto 40’. A partir de aquí, Atlas se dispuso a matar al rey de la selva o morir en el intento. Y empezó bien la cacería, al 44’, autogol de Tigres. Gol de Atlas. Sorpresa. Hugo Ayala, ex rojinegro, marcó en propia meta con un certero cabezazo en el área chica. Garnica centró con un cañón y Ayala no supo si sacar, patear o contar la bala. No eligió ninguna, tardó tanto en decidir que marcó en propia meta. Nahuel se tendió para cumplir pero nada más. Al medio tiempo lo ganaba el local.

Para el complemento el zorro fue más escurridizo y rápido que el tigre, sabía que si quería matar al rey lo tenía que dejar ser. Y le funcionó. Al 70’, cayó el segundo de la noche. El campeón estaba cazado. En un jugada de pura velocidad, Rafael Márquez, de noche brillante, habilitó con un guante a Fidel Martínez quien dentro del área y de primera sirvió para la llegada de Matías Alustiza, el “Chavo” con el marco abierto anotó. Explotó el Jalisco. Felicidad pura.

Luego, el juego se cerró, bueno, lo cerró Atlas. La visita intentó reaccionar, pero era la noche de Atlas, del rojinegro y su gente. No le bastaron a Ferretti las piernas de Zelarayan, Aquino y Quiñones para rescatar el juego. Lo hizo tarde. Del otro lado, Cruz respira, sabe bien ganarle al campeón, sabe mejor hacerlo así. El “Profe” puede dormir tranquilo está noche, será una semana más tranquila. Un 2-0 que apaga las alarmas.

Fuente: Fútbol Pasión