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| Foto: EFE |
Los diez primeros minutos del Barcelona fueron asfixiantes para el Levante, que no encontraba la forma de sacudirse las constantes combinaciones en ataque de todo el equipo catalán. Por lo contrario Claudio Bravo arquero blaugrana tocó su primer balón a los once minutos y fue para realizar un saque de puerta.
Aunque sin tanta insistencia como al principio, el Barcelona mandaba claramente en el encuentro y en una penetración por la izquierda de Iniesta y Jordi Alba, el centro del lateral dio en la espalda del central local David Navarro y se coló en la portería de Mariño, poniendo el 0-1.
El gol igualó un poco el encuentro, no porque el equipo visitante cambiara, sino porque el conjunto local encontró al contragolpe los espacios que hasta entonces se le habían negado.
Fue en el último cuarto de hora del primer tiempo cuando el equipo valenciano encontró sus dos opciones de gol. La primera llegó en una falta cobrada por Verza, que se fue por encima del marco, y la segunda, la más clara, en un contragolpe perfecto en el que Morales envió el balón al poste.
Con la misma tónica del final del primer periodo dio comienzo el segundo, con un Levante echado para adelante generando algunos contragolpes peligrosos y presionando al Barcelona incomodándolo en todo momento.
El planteamiento defensivo del Levante dificultaba el juego del Barcelona que, a pesar de estar casi siempre cerca del área de Mariño, no encontraba el hueco para lograr un segundo tanto que cerrara el encuentro.
El partido terminó por definirse al minuto 90+1, después de una gran jugada de Messi que filtró el esférico a la entrada de Suárez, quien definió de primera poniendo el 0-2.
Fuente: Livero
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